La Asociación Extremeña de Empresas Forestales ofrece su colaboración a la Junta en la lucha contra incendios forestales

Actualizado: lunes, 18 septiembre 2006 21:50

CÁCERES, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Asociación Extremeña de Empresas Forestales y de Medio Ambiente (AEEFOR) formada por 25 empresas del sector forestal reitera su ofrecimiento a la Junta de Extremadura para suscribir un Convenio de colaboración en materia de extinción de incendios forestales mediante el cual, AAEFOR pondría a disposición del Plan Infoex todos los medios materiales, técnicos y humanos de sus empresas.

La oferta de colaboración con la Junta de Extremadura en materia de incendios forestales se decidió en la Asamblea General de la Asociación Extremeña de Empresas Forestales y de Medio Ambiente (AEEFOR) celebrada el pasado mes de julio, según informa la asociación en una nota de prensa remitida a Europa Press.

Según informan, esta colaboración se realizaría a través de un convenio mediante el cual, las 25 empresas que conforman la asociación, pondrían a disposición del Plan Infoex todos los medios materiales, técnicos y humanos cada vez que se produzca un incendio, sin contraprestación económica alguna.

Así, la Asociación cree necesario un operativo específico de movilización, en el que participarían todas las empresas forestales de la región, con personal técnico propio al frente del mismo, para acelerar la respuesta de sus medios ante cualquier alarma de incendios que requiera la presencia de maquinaria forestal y personal técnico especializado.

PLAN FORESTAL

En cuanto al Plan Forestal Extremeño como documento técnico en el que se contemplen las líneas maestras de lo que debe ser la Política Forestal Extremeña, AAEFOR cree que debe ser aprobado por el Consejo de Gobierno de la Junta, tras oír a las partes interesadas y al propio sector, así como debatido en la Asamblea de Extremadura, con el fin de que los objetivos en materia forestal, sean compartidos por todas las fuerzas políticas en el arco parlamentario.

A su vez, la Asociación considera que los bosques públicos extremeños necesitan para los próximos diez años una inversión sostenida de 90 millones de euros anuales, para su limpieza, mantenimiento, regeneración y recuperación de las especies autóctonas.

Una inversión necesaria para ordenar los montes existentes, determinar los aprovechamientos madereros sostenibles en cada espacio forestal, regenerar las zonas quemadas, ampliar la superficie de bosque para luchar contra la desertificación, crear y mantener empleo y evitar el riesgo de despoblamiento del medio rural extremeño.

AEEFOR también cree que la Junta debe ayudar al fomento de la competitividad de las empresas forestales y medioambientales extremeñas adoptando medidas tendentes a propiciar la creación de empleo estable y de calidad mediante la modificación de los criterios de adjudicación que se contemplan en los pliegos de condiciones para la contratación de obras.

De esta forma, se prima más la creación y mantenimiento de empleo estable que las bajas económicas o abandonando el enorme volumen de contratación que las administraciones públicas realizan con la empresa pública TRAGSA, lo que a su juicio, "dificulta la competitividad, perjudica el empleo y pone en riesgo la estabilidad económica y financiera de las empresas del sector forestal extremeño".

Por otra parte, AAEFOR pide una Política Forestal Común Europea dotada de un instrumento financiero que tienda a equiparar, a medio plazo, la financiación del sector forestal con la financiación de la Política Agraria Comunitaria ya que a pesar de ser muchas las alusiones a las políticas medioambientales, son escasas las dotaciones económicas que el presupuesto comunitario destina a la conservación, mejora y ampliación de los espacios forestales.

A su juicio, la Unión Europea debe contar con una Política Forestal Común que tenga en cuenta, además, el hecho diferencial del clima mediterráneo, caracterizado por las altas temperaturas y la ausencia de humedad ambiental, lo que hace que los bosques sean víctimas propiciatorias, año tras año, del azote de los incendios forestales.