La Audiencia Provincial de Cáceres juzga a un hombre acusado de robar, violar y matar a su casera hace dos años

Juzgan a un hombre acusado de robar, violar y matar a su casera hace dos años
EP
Actualizado: lunes, 28 junio 2010 17:18

Los familiares de la víctima piden "justicia" y que recaiga "la máxima pena" sobre el procesado

CÁCERES, 28 Jun. (EUROPA PRESS) -

El súbdito maroquí Ahmed Benali se sentó hoy en el banquillo de los acusados de la sección segunda de lo penal de la Audiencia Provincial de Cáceres, acusado de violar, matar y robar en 2008 a la mujer de 85 años que le alquilaba el piso donde llevaba residiendo más de un año en la ciudad cacereña de Plasencia.

Con hora y media de retraso sobre el horario previsto, a las 11,30 horas de hoy comenzó la audiencia pública , en la que los nueve miembros del jurado tendrán que deliberar si el acusado, que lleva dos años en prisión preventiva por los hechos que se le imputan, es culpable o inocente de los delitos que se le atribuyen.

El Ministerio Fiscal solicita una condena total de 35 años de cárcel por considerar a A.B el autor de los delitos de asesinato, robo y agresión sexual y física, mientras que la abogada de la acusación particular amplia la petición de pena de prisión a 45 años, por considerar que cometió un delito de violación, a diferencia de la Fiscalía que lo culpabiliza tan sólo de agresión.

Ambas partes también reclaman el pago de entre 100.000 y 50.000 euros a cada hijo en concepto de indemnización moral. Por su parte, el abogado de la defensa, alegando estado de embriaguez y drogadicción de su defendido, solicita su absolución.

RECONOCE SER AUTOR DE LA MUERTE

Durante su interrogatorio, el acusado reconoció ante la juez que había "dado muerte" a su casera el 3 de agosto de 2008, tras haber estado "toda la noche bebiendo", aunque negó haber llevado a cabo los otros dos delitos por los que también está siendo procesado.

A.B. declaró en todo momento con las manos esposadas y según observaron tanto la Fiscalía como la defensa, durante la jornada de hoy incurrió en "muchas contradicciones" respecto a su declaración inicial, ofrecida a la policía y al juez instructor de Plasencia cuando se le detuvo dos días después de la muerte de su arrendadora.

En cuanto a cómo dio muerte a la anciana y qué motivos le llevaron a ello, el detenido, tras apuntar que no lo recordaba muy bien dado "que estaba drogado" tras haber estado "de fiesta" toda la noche, explicó que al ver abierta la puerta de su casera, que vivía debajo del piso que él ocupaba, y molesto por su actitud que esa misma mañana volvió reclamarle el dinero que le adeudaba, según recordó, entró en la vivienda y la comenzó a agredir hasta acabar con su vida.

HECHOS

"Le di una patada, la cogí y la tiré encima de la cama y le comencé a pegar con un puño en la cabeza", después "le metí la mano en la boca", también le introdujo "las manos entre las piernas", en el forcejeo, y hasta llegó a ponerle un cojín con el que la asfixió según reconoció ante las preguntas de la abogada de la familia.

Sin embargo, pese a las numerosos restos de su ADN encontrados en la ropa interior de la víctima y a las lesiones genitales que presentaba la misma, el acusado aseveró que "no la penetraba".

Respecto al móvil que le llevó a este punto, Ahmed señaló que pudo deberse al "odio" que ha acumulado durante los años en España, donde según dice ha comprobado el "rechazo" que hay hacia los marroquíes desde su llegada al país.

"Estoy enfermo por ese rechazo y le ha tocado a una persona que no tenía que haberle tocado", aseveró. "Le pido disculpas", apostillaba este hombre de unos cuarenta años.

FAMILIARES PIDEN JUSTICIA

Antes del comienzo del juicio, los dos hijos de la víctima, Jesús y Javier Mateos García, pedían ante las cámara de Europa Press Televisión, que "se haga justicia" y que recaiga sobre el culpable "la máxima pena", y si es posible que lo "extraditen" a su país.

Para los familiares de la fallecida los problemas con el inquilino marroquí surgieron a raíz de que éste se quedara sin trabajo y sin dinero para hacer frente a la renta, unos meses antes de la lamentable muerte de su madre, que según dicen llevaba "un año" alquilando el piso a este hombre, sin que hubiera protagonizado incidentes o creado problemas anteriormente.