MÉRIDA, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -
La selección española de fútbol se entrenó ayer por la noche en el estadio Romano de Mérida ante 15.000 aficionados, en una sesión en la que Vicente del Bosque probó la incursión de Nacho Monreal y Raúl Albiol en la defensa, además de Mata por la banda derecha en detrimento de Xavi Hernández.
La vigente campeona de Europa contó con la afición extremeña, que aprovechó su día festivo para apoyar en masa a su selección. De hecho, el estadio emeritense no pudo acoger a todos los aficionados que hasta allí se acercaron porque se encontraron con el cartel de 'aforo completo'.
Un excelente síntoma para los jugadores de Del Bosque, que saben a buen seguro que mañana se encontrarán con un estadio repleto. En cuando al entrenamiento en sí, el técnico salmantino probó con Monreal por el costado izquierdo, lo que daría descanso a Capdevila y a Albiol en el centro de la zaga en detrimento de Arbeloa.
Aún así, Del Bosque no terminó de despejar la incógnita ya que con posterioridad también probó a su paisano Arbeloa como lateral. Lo que parece claro es que el técnico español mantendrá casi al completo el centro del campo que jugó ante Bélgica en Riazor. Salvo Xavi Hernández, que será sustituido por Mata, España alineará a Busquets y Xabi Alonso, con más poder en la medular.
En relación al controvertido debate de los dos delanteros, Del Bosque no tiene dudas. El resultado ante los belgas confirma su apuesta clara por los dos puntas. Así Villa --que quiere seguir acercándose a Raúl-- y Torres serán la punta de ataque.
