Actualizado 17/01/2007 22:12

Estatuto.- Los partidos fracasan en aprobar la reforma esta legislatura y culpan al "clima político" estatal

Galicia Actual

El BNG se suma a las propuestas de Touriño sobre identidad y estatus de la lengua, pero el PP no pasa de reconocer "sentimiento nacional"


SANTIAGO DE COMPOSTELA, 17 Ene. (EUROPA PRESS) -

Los líderes de los tres partidos políticos con representación parlamentaria no consiguieron hoy desbloquear la reforma del Estatuto de Autonomía para aprobar un nuevo texto dentro de la presente legislatura de las Cortes Generales y tanto Emilio Pérez Touriño como Anxo Quintana coincidieron en culpar de este fracaso al "clima político" estatal, marcado por la "tensión", una justificación a la que también se sumó, en parte, Alberto Núñez Feijóo.

Los tres líderes, que se reunieron durante más de seis horas en la residencia oficial de Monte Pío, no lograron superar las diferencias que mantenían, principalmente, en la identidad de Galicia y el estatus del gallego; aunque tampoco consiguieron cerrar el capítulo relativo a la financiación autonómica.

Por ello, Touriño y Quintana coincidieron en aplazar el debate hasta que exista un "momento político más favorable que permita garantías de éxito"; mientras que el presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo, consideró que el trabajo realizado hasta ahora "merece la pena" y reconoció que le "vale mayo", una vez superadas las elecciones municipales, para retomar el proceso.

Los socios del bipartito juzgaron que el clima político "de confrontación" que actualmente se vive en el Estado "influyó" en el resultado de las negociaciones del Estatuto gallego. Así, para Touriño, esta situación "tiene que ver precisamente con los temas territoriales y de terrorismo, que están en su clímax en el tema de la unidad nacional y que pusieron más difícil la flexibilidad y la cesión".

Núñez Feijóo compartió que en Madrid hay una "situación política de tensión", aunque mantuvo que "se podría haber solventado con inteligencia". En su opinión, si no se hubiera abierto el debate sobre el Estado plurinacional, "sería posible un Estatuto".

ENFRENTAMIENTOS

En consecuencia, pese a que el portavoz nacional del BNG, Anxo Quintana, se sumó a las propuestas planteadas por su socio en la definición identitaria, el líder del PPdeG rechazó apoyar sus planteamientos y reivindicó en la reunión el reconocimiento del "sentimiento nacional" de Galicia.

Así, la propuesta de Touriño aludía a la Ley de Símbolos aprobada en el Parlamento en 1984, que incluye la referencia a la palabra 'nación' en el Himno gallego, al tiempo que apostaba por recoger el "carácter nacional" que, según él, "encuentra su expresión" tanto en la Constitución como en el propio texto vigente.

Anxo Quintana decidió sumarse a este planteamiento, a pesar de aclarar que, en su opinión, "no es buena y habría que matizarla y puntualizarla". Por contra, Núñez Feijóo rechazó el término 'nación' y aseguró que "sentimiento nacional compagina galleguismo y nacionalismo dentro de la Constitución", en lo que definió como la propuesta "más ambiciosa que se hizo en ninguna comunidad autónoma del Estado, salvo en Cataluña".

LENGUA Y FINANCIACIÓN

En cuanto al debate idiomático, el vicepresidente también optó por apoyar la fórmula planteada por Touriño, que abogaba por "igualar jurídicamente" los dos idiomas oficiales de la comunidad, pese a que la "propuesta B" presentada por Quintana ya apostaba por que ambas lenguas tengan "plena igualdad de estatus jurídico", de modo que renunciaba al "deber" de conocer el gallego.

No obstante, el líder de la oposición aseguró que existían "flecos" entre los planteamientos de los partidos que impidieron el acuerdo, ya que los populares apostaron por "dejar el Estatuto como está" en materia lingüística o "alcanzar la igualdad plena entre gallego y castellano en el ámbito de la Constitución".

Por lo que respecta a la financiación, Touriño aseguró que las diferencias se limitaron a "matices", ya que la reunión permitió "avances significativos", después de que el PPdeG aceptase gran parte de la propuesta del presidente. Mientras, Quintana retiró de su planteamiento inicial fijar los porcentajes de cesión del 90 por ciento para IVA e IRPF y del 100 por ciento para los impuestos especiales, si bien mantuvo su apuesta por fijar criterios de suficiencia negociados entre Galicia y Madrid.

FRACASO

En esta coyuntura, los tres líderes evitaron atribuirse el fracaso del proceso estatutario y, si bien Touriño y Quintana reconocieron que "se perdió una oportunidad inmejorable", consideraron que los perjuicios de la falta de consenso los sufrirá la comunidad. "No se logró el objetivo planteado y el de hoy no es un día positivo para Galicia", declaró el presidente.

"Lo intentamos, pero no pudo ser", lamentó Anxo Quintana, quien añadió que "habrá que esperar a otro momento político para que el acuerdo se pueda dar". "Creo que podía haber un Estatuto y no lo hay", aseveró, por su parte, Feijóo, tras lo cual advirtió de que "el tiempo dará o quitará razones".

Así, esta primera cita a tres bandas culminó meses de trabajo al máximo nivel entre los líderes políticos, quienes mantuvieron, con la de hoy, hasta cuatro reuniones. La primera de ellas se produjo el pasado mes de julio entre Quintana y Feijóo; la segunda, entre Touriño y el líder del PPdeG en noviembre y la última entre el vicepresidente y dirigente popular el 23 de diciembre.

No obstante, el debate se habían iniciado mucho antes, a principios del pasado año, con la constitución en el Parlamento de la Comisión de Estudio de la Reforma del Estatuto de Autonomía, que trabajó ininterrumpidamente con comparecencias y reuniones a puerta cerrada hasta ayer mismo.