Asegura que las puertas de la inversión en Galicia "siempre estarán abiertas a Pescanova" y respeta la legitimidad de sus decisiones
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Xunta de Galicia, Emilio Pérez Touriño, insistió hoy en que, ante la ausencia de acuerdo entre las fuerzas parlamentarias gallegas respecto a la reforma estatuaria, es necesario "pasar página" hasta que cambie el escenario político. Mientras, comprometió el trabajo de su gobierno en el desarrollo del Estatuto de Autonomía en vigor, a partir de la solicitud de nuevas competencias al Estado.
En una entrevista en la Radio Galega, recogida por Europa Press, admitió que lograr la reforma del Estatuto "sería bueno para Galicia", porque "con la fuerza que da ese instrumento, tendríamos una legitimidad y una fortaleza política superior". Sin embargo, rechazó que sin la reforma, la Comunidad carezca "de instrumentos, de las armas políticas y legales suficientes" para conseguir mayor financiación y mayores inversiones por parte del Estado.
Anunció que la Xunta centrará su acción inmediata en "desplegar todo el potencial y todo el fomento de iniciativas políticas en el desarrollo de competencias" fijadas en la norma autonómica actual. Reconoció que en los últimos meses los esfuerzos estuvieron centrados en la reforma, pero aseguró que a través de Vicepresidencia se retomará la demanda de transferencias del Estado.
Según Touriño, "tenemos un gran Estatuto que nos ofrece posibilidades de desarrollo importante". Así, se refirió a la adquisición de competencias en el terreno de la policía autonómica, en la seguridad viaria o en la Confederación Hidrográfica del Miño como algunos de los desafíos más inminentes.
NO RENUNCIAR A UN ESTATUTO "DE PRIMERA"
No obstante, aunque defendió que "conviene pasar página y trabajar en nuevas coordenadas", el jefe del Gobierno gallego advirtió de que eso "no quiere decir que en el momento oportuno en que consideremos que el escenario político ha cambiado y que hay posibilidades reabramos el libro de la reformas y volvamos al capítulos que hoy no fuimos capaces de cerrar".
En alusión al PPdeG, aseguró que "las puertas del presidente de la Xunta siempre estarán abiertas" para buscar el consenso que permita la reforma del Estatuto. Pero Touriño insistió en que "el único requisito" para ese diálogo futuro es "que nunca sea para firmar un estatuto de segunda, un estatuto que no sea pleno, un estatuto que deje a Galicia por debajo de las comunidades autónomas de España, Cataluña, Euskadi y Andalucía".
El presidente de la Xunta relacionó el fracaso de la reforma estatutaria con el "clima político derivado de esa posición del PP instalado en una dura confrontación". Lamentó que el presidente del PPdeG "no sea capaza de dar el salto de no estar encadenado a Génova" y que "eligiese la disciplina de partido" en lugar de a Galicia y a la reforma del Estatuto.
REFLEXIÓN EN EL PP
Aprovechó para invitar a este partido a "hacer una reflexión", ya que le recordó que "durante años tuvo una sólida responsabilidad, porque gobernó el país durante muchos años y participó en la construcción autonómica". Por ello, opinó que ahora "no puede involucionar y volver atrás".
Touriño, que mantuvo que el Gobierno gallego no estuvo "condicionado, ni varado ni paralizado" por esa reforma, aseguró que el Estatuto "queda en suspenso indefinidamente". No obstante, admitió que habrá que trabajar para que los factores que impidieron sacar adelante el nuevo Estatuto "puedan ser modificados en lo que queda de legislatura", ya que, según dijo, "sigue pensando que es bueno, y es indispensable y es necesario que Galicia tenga esa reforma".
El presidente de la Xunta animó a "trabajar" y le transmitió al presidente del PPdeG que "siempre estará en disposición" de reemprender la reforma estatuaria en el momento necesario "si él modifica esa situación, si él está dispuesto a dar el paso". Resumió las condiciones para reabrir ese proceso en "algo tan simple como que se pueda firmar un estatuto pleno y un estatuto de primera".
Touriño reiteró que Galicia debe contar con "un estatuto que recoja el sentimiento, la referencia identitaria de este país, un estatuto de máximos competenciales, de máximos en financiación y que nos una en torno a la lengua". Afirmó que buena parte de esas condiciones ya fueron conseguidas y que falta "fundamentalmente, que Galicia no quede en segunda división". "Yo nunca firmaré como presidente de la Xunta un estatuto de segunda división", señaló.
RESPETO A PESCANOVA
Al margen de la reforma estatutaria, el presidente de la Xunta quiso dar por "zanjada" la polémica con Pescanova, diciendo que el Gobierno gallego está en posiciones de "defender y agilizar este sector" mediante un plan de acuicultura que anunció para abril o mayo. Apuntó que este plan "potenciará la acuicultura de forma extraordinaria" y aseguró que en él "están interesados y en posición de invertir importantes empresas del sector en España e internacionales, firmas líderes en el ámbito mundial".
En ese contexto, Touriño defendió la legitimidad de las decisiones de la empresa y enfatizó que "las puertas de la inversión de Galicia siempre estarán abiertas para Pescanova".
En relación con este asunto, resaltó que el Gobierno gallego puso "todo lo mejor para ofertar terrenos y condiciones" a esa firma, que se trabajó en "multiplicidad de reuniones" e, incluso, que el Consello de la Xunta aprobó el interés supramunicipal para viabilizar los proyectos concretos de Pescanova en la costa de Lugo.
Además, indicó que la última reunión se produjo el pasado lunes entre los dirigentes de Pescanova y los conselleiros de Pesca y Economía y que el resultado de la misma había sido positivo, pero insistió en respetar las decisiones de la empresa y rechazó seguir alimentando la polémica.
PGOM DE VIGO
Por otra parte, volvió a rechazar hoy las críticas que relacionan la paralización del Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) de Vigo con una estrategia electoral. Según afirmó, tiene "la clara convicción de que para la Xunta lo mejor que podía pasar en terrenos electorales y partidarios sería haber aprobado ese Plan". Por el contrario, defendió la obligación del Gobierno gallego de "velar por el interés general haciendo cumplir la ley y cumpliendo la ley".
El presidente de la Xunta reiteró su compromiso con que la ciudad olívica tendrá un PGOM este año y animó al ayuntamiento a "ponerse las pilas" para conseguirlo. Subrayó que la Consellería de Política Territorial está en disposición de ponerse a trabajar para ayudar al Ayuntamiento de Vigo para que este año revise, modifique lo que tenga que ser para garantizar el cumplimiento de la ley y que pueda tener plan urbanístico.
