Suárez Canal asegura que el verano de 2008 fue "con toda seguridad" el "mejor de la historia desde que existe información de incendios"
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
Galicia registró 1.011 incendios forestales que afectaron a 1.131 hectáreas durante la época de máximo riesgo de verano, comprendida entre el 1 de junio y el 30 de septiembre. Estas cifras reflejan una reducción del 5,7 por ciento en el número de fuegos y del 43,1 por ciento en el de superficie ardida con respecto a la campaña de verano del año pasado, que duró tres meses frente a los cuatro de la que acaba de finalizar.
Así lo anunció hoy el conselleiro de Medio Rural, Alfredo Suárez Canal, durante la presentación de los datos provisionales del periodo de máximo riesgo, caracterizado "con toda seguridad", según destacó, por ser "el mejor verano de la historia desde que existe información sobre incendios".
Una afirmación que justificó al señalar que la superficie afectada por el fuego descendió un 95 por ciento esos cuatro meses frente a la media anual calcinada en el periodo 1995-2007 --24.598 hectáreas--. Más del 71 por ciento de las 1.131 hectáreas quemadas --812-- correspondieron a superficie rasa y, el resto, a zonas arboladas, un total de 318.
Pese a reconocer la "influencia" de las condiciones meteorológicas dadas como "variable" a considerar, matizó que "no es la única que explica la evolución" de los incendios de este verano para subrayar así la trascendencia de la valorización del monte, los trabajos de prevención, la colaboración ciudadana y el despliegue, "por primera vez", del dispositivo de lucha contra el fuego.
Los datos de esta campaña llevaron al conselleiro a considerar que la Administración gallega está "en la senda adecuada", pese a advertir de la elevada intencionalidad de los incendios contabilizados.
LA LLUVIA, UN "DATO FUNDAMENTAL"
No obstante, el conselleiro sí consideró un "dato fundamental" la presencia de la lluvia durante los cuatro meses de campaña por su contribución a mantener "el terreno húmedo". Entre junio y septiembre de 2008 se recogió una media de 34 litros por metro cuadrado -- y un total de 268 litros en los cuatro meses--, cifra que, como precisó, es "un poco inferior a las precipitaciones acumuladas" en años anteriores.
"El año pasado llovió más y hubo 279 incendios cada mes", apuntó para insistir en que los incendios forestales dependen de más de una variable, dado que durante el presente periodo de máximo riesgo se declaró un promedio de 257 fuegos cada mes. "La pluviometría influye, pero no es la única variable", reiteró, después de apuntar la incidencia de unas temperaturas y vientos en parámetros más bajos que otros años.
DETENCIONES E INVESTIGACIÓN
Entre los factores responsables de la disminución del número de fuegos, Suárez Canal citó el despliegue "por primera vez" de "todo" el dispositivo de la Xunta así como de los "nuevos protocolos" de actuación, "dotaciones" de medios y efectivos, además del refuerzo "íntegro" del personal temporal de verano a través de la empresa pública Servizos Agrarios Galegos (Seaga).
El conselleiro mencionó como variables destacadas la "colaboración" y "concienciación" ciudadana con respecto a la disminución de "prácticas de riesgo" --quemas de rastrojos y parcelas forestales en estado de abandono-- y las denuncias que posibilitaron, como detalló, "muchas detenciones".
En concreto entre enero y agosto las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado arrestaron a 135 personas, una cifra que, según valoró, se mantiene "en los parámetros del año pasado". Con respecto a las causas del fuego, indicó que se investigaron un 35 por ciento de los incendios, un 14,8 por ciento de los conatos y el 18,7 por ciento de las quemas.
También subrayó la actuación de las brigadas de investigación forestal cuyo "trabajo exhaustivo" permitió, como añadió, la apertura de 1.352 expedientes vinculados a la realización de prácticas de riesgo como quemas de rastrojos o el abandono de parcelas forestales. Más de un 13 por ciento de esos expedientes dieron lugar a una sanción, aunque el conselleiro apuntó que contribuyeron a estimular las labores de limpieza.
Precisamente se refirió a la prevención de incendios y, en concreto, al "refuerzo" de las actuaciones de desbroce, limpieza y quema controlada de biomasa forestal que permitieron tratar 745 hectáreas en el primer trimestre del año. Entre septiembre y finales de 2008 se hará lo mismo en 1.725 hectáreas.
Aparte, aludió a la relevancia de la "participación social" en la prevención de los incendios, tras destacar que, en suma, colaboraron 110 unidades de vigilancia, medios y cisternas de agua de 100 cooperativas agrarias y unas 5.000 personas entre voluntarios, municipios, asociaciones de montes vecinales y mancomunados.
INTENCIONALIDAD "IMPORTANTE"
Suárez Canal agradeció especialmente la labor de los trabajadores del operativo contra incendios, de los voluntarios y de las instituciones que colaboraron en la campaña de verano.
Tras considerar de "razonablemente satisfactorio" el resultado de los cuatro meses analizados y advertir de la provisionalidad de los datos hasta finales de año, recordó que todavía "hay mucho camino por recorrer" y que es una "batalla de todos".
"El número de incendios descendió muchísimo pero sigue habiendo una gran intencionalidad", insistió, pese a afirmar que la proporción de fuegos intencionados disminuyó hasta el 69 por ciento frente al 73 por ciento del año pasado. Otro 13 por ciento de los focos fueron de origen desconocido --19 por ciento en 2007--. La proporción entre las detenciones y el total de fuegos fue del 5,8 por ciento este verano frente al 6,27 del año pasado.
En cuanto a los tipos de incendios registrados, avanzó que no se produjeron grandes incendios en Galicia --con una afectación superior a las 500 hectáreas- ni medianos --de más de 100 hectáreas--. Tampoco se declararon fuegos que afectasen a más de 15 hectáreas de superficie arbórea o que amenazasen la vida de personas y la integridad de viviendas y otros bienes materiales --nivel 1 y 2, respectivamente--.
SIN TRIUNFALISMOS
Pese a la satisfacción reconocida ante los datos provisionales de esta campaña, Suárez Canal advirtió de que en materia de incendios forestales "no hay que ser triunfalista", sino realizar "balances con rigor" y "perspectiva de futuro".
A este respecto volvió a insistir en que queda "un largo camino por recorrer" en el que, como añadió, debe apostarse por la valorización del monte, la "tolerancia cero" contra los incendiarios, la colaboración institucional y la prevención.
PROVINCIAS
Ourense fue la provincia más afectada en cuanto a número de incendios forestales declarados, así como de superficie quemada este verano, al registrar 358 focos y 581 hectáreas calcinadas. Por detrás figuró A Coruña, con 250 incendios y 265 hectáreas afectadas
Por otra parte, Pontevedra se situó en la tercera posición gallega en cuanto a número de incidencias, 241, y Lugo, en la cuarta, con 162. No obstante, Lugo superó a Pontevedra en materia de superficie quemada, con 199 hectáreas ardidas en el primer caso y a 84 en el segundo.
