Urge emplear los 3,2 millones del fondo europeo para el desarrollo de "verdaderas políticas de fondo para luchar contra los incendios"
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 30 May. (EUROPA PRESS) -
La eurodiputada gallega adscrita al Grupo de la Izquierda Unitaria Europea-Izquierda Verde Nórdica (GUE/NGL), Lídia Senra, ha advertido este jueves que "la crisis del agro europeo no se soluciona solo repartiendo ayudas, sino con una política pública y fuerte".
En un comunicado, Senra ha alertado de que la posición sobre la PAC 2021-2027 aprobada este miércoles por el pleno del Parlamento Europeo "incluso empeora" la propuesta de la Comisión Europea.
"Si realmente la UE quiere apostar por un medio rural vivo, y no por extensiones de tierra al servicio de la gran agroindustria, es necesario garantizar que las personas que trabajan produciendo alimentos tengan precios que cobran costes y trabajo de producción", ha advertido.
Al tiempo, ha incidido una vez más en la "irresponsabilidad política" con la que, a su modo de ver, actúan las instituciones comunitarias al "obviar su labor de, precisamente, elaborar políticas que regulen los mercados y la producción, un aspecto esencial y determinante" que "no puede quedar única y exclusivamente en una cuestión de voluntariedad".
INCENDIOS
Por otra parte, tras aprobar el Parlamento Europeo la movilización de distintas partidas del Fondo de Solidaridad de la Unión Europea (FSUE), incluyendo 3,2 millones de euros para medidas relacionadas con las consecuencias de la ola de incendios que tuvo lugar en Galicia en octubre de 2017, Senra ha urgido usar estos recurso "para el desarrollo de verdaderas políticas de fondo para luchar contra los fuegos".
La eurodiputada gallega ha valorado esta medida puesto que "supone un aporte", si bien ha recordado que, según se desprende de los datos proporcionados por el Estado español en su solicitud de fondos a la UE, los daños directos "totales" están estimados "en 129, 1 millones de euros".
Senra ha planteado varias propuestas, empezando por desarrollar "medidas políticas que favorezcan el mantenimiento e instalación de pequeñas y medianas granjas familiares", así como "un sistema público y permanente de prevención y lucha contra los incendios que tenga en cuenta los efectos del cambio climático".
También plantea "el fin del monocultivo de eucalipto y de su expansión por tierras agrarias".
