PONTEVEDRA, 7 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los productores y elaboradores representados en la Mesa do Viño han alcanzado un preacuerdo que establece una línea orientativa en los precios de la uva en función de la gradación y las cosechas. Sin embargo, esto no supone la culminación del proceso, sino que ahora se abre un plazo máximo de una semana para que se puedan adherir las principales bodegas de la Denominación de Origen Rías Baixas.
"A ver si se conforma una propuesta los suficientemente representativa que permita la firma de todas las partes del sector", ha indicado el director xeral Montes, Tomás Fernández Couto, tras la reunión que se ha prolongado durante casi tres horas en la Delegación Territorial de la Xunta en Pontevedra.
El preacuerdo, que tendría una vigencia de 4 años, contempla también condiciones de pago y procedimiento de comercialización de la uva. Fernández Couto ha calificado de "difícil" todo el proceso debido al "momento delicado" de la economía y los mercados que ha derivado en una "acumulación de vino en las bodegas".
No obstante, ha destacado la "madurez" del sector, tanto de productores como trasformadores y comercializadores para abordar esta negociación, su "apuesta por la denominación de origen" y su voluntad por garantizar el "equilibro y estabilidad" del mercado.
UN AÑO "MUY CRÍTICO"
En esta línea, el portavoz de Fruga-Asociación Galega de Viticultores, Jorge Cardoso, ha coincidido con el director xeral en que se está ante un año "muy crítico" en el que se redujo el consumo de vino, lo que ha motivado que las bodegas traten de "tirar el precio a la baja".
En este sentido, Cardoso ha asegurado, en declaraciones a Europa Press, que los productores han hecho un "esfuerzo tremendo" por firmar estos contratos, argumentando que ha bajado entre un 10 y un 15 por ciento sus expectativas de cobro, una circunstancia que "tienen que entender los elaboradores".
Aunque ha eludido concretar cantidades, el preacuerdo establece un "precio bueno para el momento actual", que en otras circunstancias sería "bajo". Aún así, Fruga hace un llamamiento a los bodegueros para que se adhieran al preacuerdo, lo que permitiría favorecer que el sector esté "saneado y equilibrado".
Además, Jorge Cardoso ha destacado que el contrato "daría lugar a una financiación del Igape para poder tener el dinero en diciembre" y ha advertido de que "si no se firma puede ser un caos tremendo para el sector".
