Rural.- La renovación de los Consellos Reguladores finaliza mañana con la votación de la D.O. de Queixo de O Cebreiro

Actualizado: martes, 25 diciembre 2007 14:18

Galicia cuenta con 16 D.O e IXP en las que están implicadas 700 industrias y 25.000 productores que facturan 200 millones en origen

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 25 Dic. (EUROPA PRESS) -

La elección mañana de un representante del sector ganadero y tres del industrial de la Denominación de Orixe de Queixo de O Cebreiro pondrá fin al proceso de renovación llevado a cabo a lo largo de este año de los Consellos Reguladores existentes en Galicia que aglutinan a 16 D.O e Indicacións Xeográficas Protexidas (IXP) que están conformadas por 700 industrias en las que participan 25.000 productores que facturan 200 millones de euros en origen.

Los 16 Consellos Reguladores de productos gallegos con distintivo de calidad que se sometieron a un proceso de renovación a partir del 1 de julio fueron las cinco D.O de vinos (Ribeiro, Rías Baixas, Valdeorras, Monterroso y Ribeira Sacra) y de las cuatro de quesos (San Simón da Costa, Arzúa-Ulloa, Tetilla e Cebreiro), así como de las indicación xeográficas protexidas (I.X.P) Ternera Gallega, Pataca Galega, Mel de Galicia, Lacón Galego, Pan de Cea, Augardentes e Licores Tradicionais de Galicia e Agricultura Ecolóxica.

La publicación a principios de año del decreto que regulaba las denominaciones geográficas de calidad fue el primer paso para la renovación de unas entidades que llevaban años esperando este proceso que se culmina con la votación de mañana en la D.O de O Cebreiro y que ha supuesto que estos órganos dejen de estar "tutelados" por la Administración gallega y cuenten con "mayor autonomía".

Así lo admitió a Europa Press el director xeral de Calidade Agroalimentaria, Antonio Oca, quien no ocultó la "enorme satisfacción" de la Consellería de Medio Rural, impulsora de esta renovación, por cómo se ha desarrollado el proceso que concluye sin que se haya producido "ni un sólo recurso o impugnación". Precisamente, reformar el reglamento de los Consellos Reguladores para adaptarlo a la normativa europea de Calidad Agroalimentaria Diferenciada era una asignatura pendiente cuando el equipo del nacionalista Alfredo Suárez Canal asumió la Consellería de Medio Rural.

La renovación de los consellos reguladores y la democratización de sus órganos de decisión --término con el que acuñó en todo momento la Consellería de Medio Rural este proceso-- forman parte de la nueva política de mejora y apoyo a las denominaciones de calidad iniciada por el nuevo gobierno gallego, y que, tal y como recordó el director xeral de Calidade, se plasmó también en la creación del Instituto Galego de Calidade Alimentaria. Con todo, la medida principal de esta reforma y de este proceso radicó en que los presidentes han sido elegidos por el pleno de cada 'consello' y ratificados por el conselleiro, mientras que con el Ejecutivo anterior era el titular de este departamento el que nombraba o los presidentes, a propuesta del pleno.

Tal y como se estableció en el Decreto aprobado el 18 de enero de 2007, y que desarrolla la Lei 2/2005 de promoción e defensa da calidade alimentaria galega, la Consellaría do Medio Rural convocó en marzo este proceso en siete de estas entidades, las que poseían una prórroga en su mandato desde hacía más tiempo. Eran las cinco denominaciones de origen vitivinícolas Rías Baixas, Ribeiro, Ribeira Sacra, Monterrei y Valdeorras y de las Indicacións Xeográficas Protexidas Ternera Gallega e Pataca de Galicia.

Las elecciones al pleno de estos siete consellos reguladores se celebró el pasado 1 de julio, cuando se propuso y eligió a los presidentes y vicepresidentes de estas entidades. La supervisión del proceso electoral será realizada por la Xunta Electoral de Denominación, compuesta por personal de la consellería y por miembros de las organizaciones profesionales agrarias, de las cooperativas y de las asociaciones sectoriales representativas dentro de cada denominación.

Oca incidió que la convocatoria por parte de Medio Rural de este proceso electoral entronca con la nueva política de "apoyo y mejora" de las denominaciones de calidad y busca facilitarles su adaptación a las normativas internacionales de calidad alimentaria. Así, explicó que esta renovación de los órganos de gobierno de los consellos reguladores ha favorecido su "independencia y profesionalización", de forma que han actuado "autónomamente" y han podido elegir, "sin ingerencias externas", a sus máximos responsables.

El departamento que dirige Suárez Canal exaltó que, de este modo, se ha dado un "giro radical" a la política desempeñada por el anterior gobierno gallego, que "tutorizaba" la elección del presidente de cada consello regulador. Por contra, la consellería destacó el hecho de que a través de este proceso electoral, han sido lo propios miembros adscritos a cada denominación de calidad los que pudieron votar a sus representantes en el pleno que han sido, a su vez, los encargados de proponer y elegir los nuevos cargos directivos que, además, no tiene porque contar necesariamente con la condición de vocal.

De esta forma, el conselleiro se limitó exclusivamente en todo este proceso a ratificar la elección del pleno, mientras que anteriormente era quien realmente nombraba a las personas para el cargo de presidentes. Tras todo este proceso, a la Administración autonómica le corresponderá llevar a cabo las auditorías, con las que "supervisará" que estas entidades están "haciendo las cosas de acuerdo con la normativa y la legalidad".

RETOS.

Tras llegar al final mañana con esta importante y decisiva etapa, Oca advirtió de que para los Consellos Reguladores abren ahora un horizonte con nuevos retos y entre los que el director xeral ensalzó la creación del reglamento interno que se adapte a las nuevas normativas, sobre todo, a la europea de Calidad Agroalimentaria Diferenciada. De este modo, el segundo de los cambios a los que tienen que hacer frente a partir de ahora se refiere a los controles de calidad que tienen que superar los productos y que garanticen, ante todo el origen.

"Un producto que se quiere inscribir en una D.O. o IXP tiene que cumplir una serie de requisitos en su producción y transformación que demuestren que tiene unas características propias y diferenciadas, como el caso, a modo de ejemplo, de que se trata de un vino de O Ribeiro y no de mesa", esgrimió Oca para subrayar la importancia de estos controles de calidad que tienen que estar avalados por un órgano certificador "independiente".

El director xeral de Calidade Agroalimentaria justificó este paso debido a los controles exigidos por la normativa europea de Calidad Agroalimentaria que exige acreditar que se cumplen. Cada Consello Regulador debe decidir como certifica sus productos y contará con tres maneras para hacerlo.

Una de ellas, es que el Consello Regulador cree su órgano certificador y sea ella misma quien acredite que su producto si cumple con los requisitos de diferenciadores que recoge la normativa europea. No obstante, para ello, Oca aclaró que este instrumento no puede ser "juez y parte" por lo que debe estar "totalmente avalada" su independencia y esto lo confirma la ENAC, la Entidad Nacional de Acreditación es el organismo designado por la Administración para establecer y mantener el sistema de acreditación a nivel nacional, de acuerdo a normas internacionales, siguiendo en todo momento las políticas y recomendaciones establecidas por la Unión Europea.

La segunda opción pasa por contratar una entidad independiente de control, especializada en llevar a cabo la certificación de estos parámetros de calidad y, la tercera, es recurrir al Instituto Galego de Calidade (Ingacal). Esta última posibilidad fue defendida por Oca para aquellos Consellos Reguladores más pequeños y con menor capacidad financiera para hacer frente a crear su propio órgano certificador o recurrir a contratar este servicio a una empresa externa y que, en ambos casos, resulta "muy gravoso".