Rural.- Los sindicatos agrarios temen el cierre de numerosas explotaciones si Xunta y Gobierno no adoptan medidas

Actualizado: jueves, 20 noviembre 2008 20:30

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -

Las tres organizaciones agrarias, Unións Agrarias (UU.AA.), Xóvenes Agricultores (XX.AA.) y Sindicato Labrego Galego (SLG) coincidieron hoy en expresar su temor a que la reforma de la Política Agraria Común (PAC) aprobada por la UE se salde con el cierre de numerosas explotaciones de la comunidad si los gobiernos central y gallego no adoptan medidas específicas de actuación.

El secretario xeral de UU.AA., Roberto García, aseguró a Europa Press que el sector lácteo gallego ha perdido "su última oportunidad" al considerar que las iniciativas respaldadas por los 27 estados comunitarios acentuarán las importaciones masivas y la competencia desleal de precios de la materia prima procedente de países excedentarios.

De igual modo que su homólogo de XX.AA, Francisco Bello, García lamentó que la UE decidiese impulsar un incremento proporcional de la capacidad productiva para el conjunto de los países, tanto excedentarios como deficitarios. Según estimó, entre 3.000 y 4.000 explotaciones lácteas podrían cerrar de mantenerse la actual coyuntura de caída de precios.

Por su parte, la secretaria xeral del SLG calificó de "nefasto" el aumento lineal de las cuotas dado que, como recordó, la Unión Europea no necesita producir más leche al tener "prácticamente cubiertas sus necesidades de consumo".

A su juicio, las industrias lácteas emplearán este argumento para rebajar "aún más" el precio a los ganaderos gallegos. En esta línea también condenó que los estados no hayan aprobado mecanismos de control del importe de la materia prima. "La situación es bien complicada y terrible", afirmó.

PLAN ESTRATÉGICO

Pese a su escepticismo ante las medidas aprobadas esta madrugada, los responsables de UU.AA. y XX.AA. instaron a iniciar un trabajo conjunto entre todos los agentes del sector lácteo y las administraciones. "Al sector le quedan cinco años para ponerse al día y ser competitivo", afirmó Bello, que reclamó a los Gobiernos central y gallego un "plan estratégico y ambicioso" para impulsar el crecimiento del sector.

En este sentido exigió al Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MARM) la negociación de una ley de distribución que regule los márgenes comerciales, de forma que "primero se venda la leche de España" y, posteriormente, permitir las importaciones.

No obstante, Xóvenes Agricultores aspira, según apuntó, a que los ganaderos españoles puedan producir los tres millones de toneladas que el Estado necesita importar, al ver limitada su cuota láctea a las seis millones de toneladas, cuando el consumo supera los nueve.

PLANTEAMIENTO CONJUNTO

"Productores, industrias y distribución tenemos que buscar un planteamiento conjunto porque, si caemos nosotros, lo siguientes serán los empresarios", advirtió el responsable de Unións Agrarias, quien además instó a las administraciones y la opinión pública a recordar que, en una coyuntura de crisis, las explotaciones lácteas gallegas son "el Citroën de muchas comarcas".

En este sentido alertó de que el cierre de esas granjas provocará la desaparición del pequeño comercio en esos municipios y, por tanto, un abandono progresivo del medio rural, y sus consiguientes consecuencias, entre las que citó los incendios forestales y deterioro del entorno medioambiental gallego.

Asimismo, UU.AA. y XX.AA. reivindicaron nuevamente la implantación de los contratos homologados como garantía de ordenación del sector y de normalización de las relaciones profesionales entre ganadero e industria.

RECORTE DE AYUDAS

El SLG denunció que muchas explotaciones agroganaderas gallegas se verán afectadas por el recorte de las ayudas directas de la PAC, con las que se prima la producción y que se paga en función de la superficie de tierra en propiedad, así como, en el caso de las granjas lecheras, en concepto de la cantidad de cuota disponible.

La UE reducirá las subvenciones a los titulares que reciban más de 5.000 euros anuales, una circunstancia que cuestionó Freire al señalar que, de este modo, una explotación beneficiaria de una ayuda de 6.000 euros asumirá un recorte igual que la que cobre 300.000 euros.

El SLG también trasladó su temor de que se intente imponer a los ganaderos gallegos la firma de contratos homologados "a precios ruinosos". A juicio de Freire, las medidas aprobadas serán "la estocada final para muchas explotaciones" tras señalar que con menos ayudas y precios de la leche más bajos no les compensará producir.

Por su parte, el secretario xeral de UU.AA. prevé que las comunidades del noroeste peninsular no se beneficien de los fondos de desarrollo rural a las que hoy hizo referencia la titular del MARM, Elena Espinosa, al sostener que las mayores asignaciones se dedicarán a las autonomías más afectadas por la reducción de las ayudas, entre las que citó a Aragón, Andalucía o Castilla-La Mancha.