SANTIAGO DE COMPOSTELA, 30 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Consellería de Medio Rural financia, con más de 85.000 euros, una investigación innovadora sobre vermicompostaje de residuos de las frutas y las hortalizas mediante el uso de 'miñocas'; puesto que estos productos constituyen un "potente fertilizante" que estaba siendo "desaprovechado".
De este modo, la empresa Ecocelta, especializada en biofertilizantes y en gestión ambiental; junto con la empresa Frutas Serafín y el Laboratorio de Biotecnología Ambiental de la Universidad de Vigo, tienen como objetivo elaborar un abono ecológico "de calidad" que permitirá cerrar el ciclo productivo "devolviendo a la tierra, para enriquecerla, lo que ya provenía de ella".
El vermicompost agiliza la elaboración de un abono de "elevada calidad" y con "destacadas propiedades agronómicas", según informó hoy el departamento que dirige Alfredo Suárez Canal. Así, actúa como "enmienda orgánica" para el suelo, puesto que adhiere sus nutrientes a la estructura orgánica del material y los va liberando poco a poco, por lo que se caracteriza por tener un efecto fertilizante "más perdurable" que el del abono químico.
Además, uno de los investigadores del Laboratorio de Biotecnología Ambiental de la Universidad de Vigo, Domingo Pérez, apuntó que varios estudios realizados en los últimos años están comprobando que el uso del vermicompost también fortalece la resistencia de las plantas a las patologías; por lo que sus beneficios son "ambientales y económicos".
Este proyecto comenzó a desarrollarse a finales del pasado año y se realizaron diversas pruebas experimentales a pequeña escala en reactores de laboratorio de 30 litros, pero en los próximos meses se comenzará a aplicar el proceso a mayor escala, utilizando de una a cuatro toneladas de material por prueba, para comprobar su eficacia en dimensiones de carácter industrial.
