Los populares dicen que recurrirán la sentencia y los nacionalistas exigen "que alguien se responsabilice por lo civil o por lo criminal"
OURENSE, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Ourense, el socialista Francisco Rodríguez, emplazó hoy a PP y BNG a "consensuar los pasos a seguir" tras la sentencia judicial que anula el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) del Ayuntamiento con el propósito de "representar y defender los intereses de Ourense".
Francisco Rodríguez compareció esta mañana en rueda de prensa para realizar una valoración sobre la sentencia judicial, y se comprometió a gestionar "este nuevo escenario heredado del anterior gobierno del PP" con "mesura, responsabilidad y adoptando todas las medidas necesarias para asegurar la mejor defensa de los intereses generales de la ciudad".
Así, señaló que "tras estudiar a fondo la sentencia" decidirán "con tranquilidad" los pasos legales a seguir "para garantizar el desarrollo ordenado de la ciudad con pleno respeto a las leyes". A juicio del regidor municipal, la sentencia judicial "confirma lo que el PSOE denuncia desde el año 2003". "Un PGOU impuesto por el PP que es un documento ilegal, especulativo, políticamente injustos y técnicamente inviable que el PP sacó adelante sin respetar los procedimiento legales", subrayó.
En su intervención, resaltó que esta es "la primera sentencia" pero añadió que "hay 17 recursos más que sitúan al planeamiento de Ourense en un escenario de incertidumbre jurídica al que hay que darle una respuesta urgente". "Esta situación es consecuencia directa de la irresponsabilidad del anterior gobierno al imponer por mayoría simple un Plan de Urbanismo ilegal", dijo.
Frente a eso, recordó que el PSOE "en coherencia con el recuro planteado contra el PGOU se planteó en su momento la posibilidad de una profunda revisión", pero lamentó que este planteamiento "no fue respaldado por nadie". Con todo, el alcalde de Ourense reiteró su propuesta de "máximo consenso" para abordar el planeamiento de la ciudad para los próximos años.
PP.
Por su parte, el portavoz popular y ex alcalde de Ourense, Enrique Nóvoa, se mostró "muy disgustado" porque es una "muy mala noticia para la ciudad de Ourense". Así, recordó que él mismo fue miembro del gobierno que dio su apoyo al PGOU y añadió que piensa "lo mismo ahora que cuando se aprobó el plan" porque, a su juicio, "diseñaba perfectamente el modelo de ciudad".
El dirigente popular recordó que la sentencia no es firme y se puede recurrir en casación ante el Tribunal Supremo, algo que harán, según anunció, porque "Ourense no puede quedar paralizado por un defecto de forma".
Durante su intervención, señaló que, desde que el PGOU entró en vigor en 2003, "sacó adelante más de 1.500 licencias de obra mayor y más de 8.000 de obra menor" y, de no recurrirla, "no se podría hablar del parque empresarial, de la cesión de terrenos de la Xunta para colegios y centros de salud o del proyecto urbanístico en torno al Campo de la Feria".
BNG.
Por otro lado, el teniente de alcalde del Ayuntamiento de Ourense, el nacionalista Alexandre Sánchez Vidal, indicó que es una noticia "nada buena" y señaló que esto está en el "debe del PP" y "alguien debería responsabilizarse de ello, o por lo civil o por lo criminal".
"Es inconcebible que un planeamiento que costó aproximadamente 220 millones de pesetas sea tumbado por un tribunal por un defecto de forma por la primera argumentación que se hacía en uno de los recursos", señaló.
En rueda de prensa, Sánchez Vidal calificó el PGOU de "chapucero y chanchullero y de desprecio a los ciudadanos" porque "los planos que se sacan a exposición pública no son los mismos que se someten a aprobación plenaria".
