PONTEVEDRA, 7 Ago. (EUROPA PRESS) -
El BNG de Cotobade (Pontevedra), uno de los municipios donde se ha declarado el nivel dos de alerta máxima, ha presentado una moción urgiendo la convocatoria de un pleno urgente para solicitar la declaración de zona catastrófica. El concejal de medio ambiente, Emilio Iglesias, aseguró que la situación es "muy crítica", con pérdidas económicas "incalculables".
Precisamente, gran parte de la superficie calcinada por el fuego es de propiedad comunal, en la que había plantaciones de pinos "con una antigüedad superior a los 20 años y que ya no valen para nada". El edil de medio ambiente explicó que había planes para micorrizar los pinares, proyectos que "habrá que retomar de otra forma".
Emilio Iglesias calculó que ya han ardido entre 5.000 y 6.000 hectáreas de monte, pertenecientes a las comunidades de Santa María y San Xurxo de Sacos, Corredoira, Viascón, Tenorio, Pazos y Carballedo. Iglesias se refirió a la "impotencia" de quienes intentan combatir el fuego. "Arde la tierra y vuelve a renacer", añadió el concejal.
En cuanto a la situación del incendio que afecta a esta zona, el concejal nacionalista señaló que "mejora en unos sitio y enseguida empeora en otros, por eso resulta imposible parar". El fuego, según Emilio Iglesias, ha superado los límites de Cotobade y se ha extendido a la parroquia de Bora, en el ayuntamiento de Pontevedra.
Las parroquias de Cotobade más afectadas son las de Tenorio y Viascón. En la primera las llamas han provocado un "desastre total", según Iglesias, y en la segunda "existe el peligro de que el fuego entre en un pueblo". En Viascón son los propios vecinos los que, según este concejal, acuden con sus propios medios. Cuentan también con tres palas facilitadas por la Consellería de Medio Rural, destinadas a abrir cortafuegos.
