Una asociación de Campañó (pontevedra) suma sus coplas satíricas a las de la operación Pokemon y reformas gubernamentales en Ourense
OURENSE, 4 May. (EUROPA PRESS) -
La celebración milenaria de la primavera ha congregado en la ciudad de Ourense a 26 construcciones de madera y elementos vegetales -"maios"- de 25 colectivos culturales, vecinales y familiares de Ourense y uno de Campañó (Pontevedra), que han sido instalados en la céntrica calle del Paseo, y visitados por miles de ciudadanos durante toda la mañana, en el cuarto día de capitalidad cultural del Eixo Atlántico.
La calle peatonal del Paseo se llenó a primera hora de los colores de las retamas, cardos, musgo y hojas colocados sobre estructuras de madera, en su mayor parte en forma de pirámides y cruces, que se sumaron al color violeta de los algarrobos que decoran la calle y florecen en estos días.
Un jurado visitó cada "maio" y escuchó las coplas para valorar tanto la construcción enmarcada en los grupos de tradicional o artístico, como la capacidad vocal y musical de los responsables de su elaboración y de su originalidad en los textos, siempre satíricos con hechos ocurrido en la ciudad o achacados a los Gobiernos estatal y autonómico.
La novedad de este año ha sido la presencia del "maio" de la asociación cultural y deportiva de Campañó (Pontevedra), que exhibió una forma tradicional cónica y una corona, elaborados con materiales diferentes a los utilizados habitualmente en Ourense.
El responsable del colectivo José María Domínguez, ha explicado a Europa Press que la tradición pontevedresa se celebra actualmente el día 1 de mayo en la Praza da Ferreiría y desde finales del siglo XIX, con un origen "igual al de los lugares de toda Europa en el que se mantiene la celebración del buen tiempo", pero con materiales diferentes. Así, en Pontevedra los maios se elaboran con ramas de hinojo y sobre ellas se colocan margaritas, rosas, mandarinas, naranjas y huevos, entre otros elementos.
PORTUGAL NO HA PODIDO ASISTIR
El propio Domínguez ha informado de que la invitación que recibió su colectivo para integrarse en los "maios" de Ourense, con motivo de participar en la programación cultural transfronteriza por la capitalidad del Eixo Atlántico en esta ciudad, llegó también a ciudades del país vecino que finalmente no pudieron asistir.
Según ha recordado, antes de la era cristiana, se "animaba a la naturaleza a ser generosa con sus cosechas iluminando con hogueras nocturnas los campos cultivados y otros rituales de los que se conserva, en muchas villas de Pontevedra y Ourense, el de los maios".
Domínguez y su asociación se han sumado a los 25 "maios" de entidades vecinales de la ciudad, la asociación de ayuda al toxicómano "Atox", de centros escolares como el IES Otero Pedrayo, de las hermanas desamparadas que asisten a personas mayores, del colectivo Bela Auria, de un grupo feminista y del grupo familiar que dijo identificarse como los del "maio do berro" (maio del grito), todos ellos complementados con coplas satíricas contra cambios legislativos y actuaciones gubernamentales de ámbito estatal, autonómico y local.
Entre ellos, un grupo vecinal del Ayuntamiento de Nogueira de Ramuín, con un maio reivindicativo en forma de tonel de vino y con la frase "con estos políticos de fandango, no vamos a tener vino tinto, clarete ni blanco", con coplas alusivas a la autovía A-76 proyectada a través de la Ribeira Sacra entre Ponferrada y Ourense, y de la que no tuvieron información pública por lo que no pudieron presentar alegaciones, según explicó un portavoz.
Los "maios" representaron además escenas cotidianas en el rural como una matanza, o una "pulpeira" cortando los rabos del cefalópodo, elaborados con mazorcas de maíz sin semilla cortadas en rodajas. También fueron numerosas las pirámides y cruces tradicionales y una reproducción del edificio conocido como "torre de Ourense" de 1961.
