La conselleira de Facenda y los grupos se reúnen hoy para acercar posturas sobre una propuesta gallega

Actualizado: viernes, 8 mayo 2009 12:38

El PP atribuye al PSOE parámetros que perjudican a Galicia, el PSdeG alerta del hándicap de no tener Estatuto nuevo y el BNG pide cifras

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 8 May. (EUROPA PRESS) -

Los tres grupos parlamentarios mantendrán hoy un primer encuentro con la conselleira de Facenda, Marta Fernández Currás, para intercambiar impresiones sobre la revisión del modelo de financiación autonómica, previo a la reunión que la semana pasada anunció el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, con las fuerzas políticas para intentar consensuar una propuesta autonómica para plantear ante el Gobierno central.

Los grupos políticos parten de puntos en común como la necesidad de que el nuevo modelo de financiación autonómica recoja parámetros beneficiosos para la comunidad gallega, como la ponderación de la dispersión y el envejecimiento de la población.

Mientras que el BNG acude a la reunión con la intención de que se pongan sobre la mesa cifras concretas a las cuales aspira la comunidad gallega, el PSdeG tiende la mano para cerrar una propuesta autonómica, pero culpa al PP del fracaso de la reforma del Estatuto, lo cual ve como "una desventaja". Por su parte, el PP alerta de que, "por iniciativa del PSOE", se están primando algunos elementos que no contribuyen a la "solidaridad interterritorial" ni benefician a Galicia, como el peso de la población.

Así, por parte del PPdeG, Pedro Puy informó a Europa Press de que la reunión convocada con la conselleira de Facenda, Marta Fernández, tiene como objetivo "que ella informe de cómo está la cosa". De este modo, consideró que los grupos acuden a este encuentro "sobre todo, para recibir información y analizar las propuestas".

El secretario xeral del PSdeG, Manuel Vázquez, ofreció al Gobierno gallego "la mano tendida" de su partido "para buscar una solución positiva que redunde en beneficio de todos los gallegos", aunque responsabilizó a Feijóo de "la cierta desventaja" con la que parte Galicia al no haber materializado la reforma del Estatuto durante la pasada legislatura.

"Las comunidades que tuvieron la madurez política para acordar, llegan ahora a la negociación de la financiación autonómica en otra posición", lamentó, al tiempo que señaló al máximo mandatario gallego como "principal artífice" de que Galicia no tenga un Estatuto de Autonomía que, a su juicio, "daría cierta garantía y solvencia".

No obstante, enfatizó el "compromiso con el diálogo" de los socialistas con el fin de lograr un modelo que incluya "los criterios claves propios de Galicia", tales como la dispersión geográfica y el envejecimiento poblacional, y fórmulas que compensen "la disminución del peso poblacional relativo para que éste no redunde negativamente". "Para lograr una clara mejoría sobre la financiación actual, que será clave para el futuro", subrayó Vázquez.

En todo caso, reclamó del presidente de la Xunta "que no anteponga los intereses de Génova o de Rajoy a los intereses de los gallegos" y le advirtió de que "no utilice a Galicia como herramienta de confrontación política para colisionar con el Gobierno de España y con el PSOE". "Le pedimos que no se deje ir por el tobogán de la demagogia", recalcó, puesto que "tiene una gran responsabilidad en estos momentos de dificultades económicas".

ACUERDO EN LOS PRINCIPIOS Pedro Puy celebró la "mano tendida" del PSdeG y subrayó que todos los partidos gallegos están "de acuerdo" con los principios que deben ser tenidos en cuenta por el Gobierno central respecto a las particularidades de Galicia. Así, confió en que "sobrecostes" como el envejecimiento y la dispersión poblacional, sean "acogidos" por el Estado, que es el encargado de "armonizar y conciliar" el reparto. "A eso aspiramos", enfatizó.

Por otra parte, a modo de réplica a los socialistas y nacionalistas, aseguró que no haber logrado la reforma del Estatuto de Autonomía durante la pasada legislatura "no quita posibilidades de obtener una buena financiación". "Por cuestiones jurídico-constitucionales, ese argumento no tiene ningún sentido", defendió, al tiempo que aseguró que la Constitución indica que "la financiación debe ser distribuida por el Estado en colaboración con las comunidades autónomas".

A mayores, criticó que los socialistas gallegos "defiendan a Zapatero", puesto que, según apuntó, "por iniciativa del PSOE" se primaron algunos elementos que no contribuyen a la "solidaridad interterritorial" ni benefician a Galicia, como el peso de la población". Así, les pidió que utilicen esa la "buena relación" con el presidente del Gobierno para lograr que sean acogidos los principios "clave" para Galicia.

OBJETIVOS CIFRADOS

Por su parte, el portavoz parlamentario del BNG, Carlos Aymerich, apostó por que en esta reunión se fijen "objetivos cifrados" sobre los criterios particulares de Galicia. "Hay que marcar un objetivo de cuánto dinero supone el envejecimiento y la dispersión poblacional, la lengua propia y la emigración", insistió.

"Esperamos que haya cifras sobre la mesa de la conselleira, porque ya no puede haber más debates etéreos", incidió, y lo atribuyó a que "tras meses hablando de conceptos, otras comunidades, como Andalucía y Cataluña, tienen cifras".

Precisamente, aludió a las dos autonomías que cuentan con un Estatuto de Autonomía para evidenciar que "han logrado negociar bilateralmente con el Estado" y coincidió con los socialistas en que Galicia cuenta con "un hándicap" en este sentido al no haber acometido la reforma del marco normativo autonómico "gracias a Feijóo y al PP".

Por ello, consideró que el presidente de la Xunta tiene "una responsabilidad suplementaria" y entendió que, "en vez de quejarse de que otras comunidades negocian bilateralmente, tiene que exigir lo mismo para lograr una financiación justa para Galicia". A juicio del nacionalista, esto le dará la "ocasión de corregir parcialmente el veto que impuso" a la reforma.

Así, pidió al dirigente popular que "asuma que ya no está en campaña, que ejerza como gobierno y que tome la iniciativa", puesto que el modelo vigente de financiación --del año 2001-- es "lesivo" para los intereses de Galicia, que "cada vez pierde más fondos". De hecho, atribuyó 335 millones de los 600 del "agujero" denunciado por Feijóo en los ingresos de la Xunta previstos para 2009 "a la disminución de transferencias derivada de la financiación autonómica". En todo caso, se mostró reacio a "creerse" ese informe.

Por último, confió en salir "satisfecho" de la reunión de hoy, en la que "se buscará una posición de país", pero no se mostró partidario de dar "cheques en blanco al PP". "Hay que echar cuentas. Si es lo que se va a hacer, adelante; pero si vamos para sacar una foto, el BNG lo denunciará", advirtió.