SANTIAGO DE COMPOSTELA, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
Cuatro investigaciones de la Universidade de Santiago de Compostela (USC), que cuentan con casi medio millón de euros de apoyo de la Axencia Galega de Innovación, exploran nuevos mecanismos de detección temprana del SARS-CoV-2, agentes antivirales y un proyecto de vacuna.
En un comunicado remitido a los medios, el vicerrector de Investigación, Vicente Pérez Muñuzuri, ha destacado que estos proyectos "buscan respuestas a cuestiones concretas" que ayudan a combatir los desafíos de la covid-19 y muestran la capacidad de investigación realizada en la USC para aportar "reacciones ágiles a desafíos urgentes".
En concreto, bajo la coordinación del investigador del Centro Singular de Investigación en Medicina Molecular e Enfermidades Crónicas de la USC (CiMUS), José A. Costoya, el proyecto 'Covtes: prueba rápida para la detección precoz de Sars-CoV-2 basada en inmunocromatografía' se centrará en el desarrollo de una prueba para detectar antígenos virales con una muestra nasal, nasofaríngea o de saliva a través de su detección específica mediante un ensayo de inmunocromatografía basado en sondas de oro nano-coloidales-anticuerpos o nanoanticuerpos, lo que permitirá la identificación de los casos positivos en las fases iniciales de la infección.
"La base de la prueba es sencilla, lo que garantizaría su bajo coste y una fácil escalabilidad industrial", explica el profesor Costoya, que lleva años trabajando junto con el Grupo de Física de coloides y Polímeros en sensores aplicados al diagnóstico y tratamiento de enfermedades.
También en lo relativo a la detección del virus se sitúa el proyecto de Eduardo Fernández Megía, que se centrará en desarrollar métodos ágiles que complementen la prueba PCR "la cual, pese a su elevada sensibilidad, es una técnica lenta, costosa y que requiere de grandes equipos y un laboratorio de microbiología", explica el investigador del Centro Singular de Investigación en Química Biológica y Materiales Moleculares de la USC (CiQUS).
Así, los 'Affidendrones' son una potente plataforma para la rápida y selectiva identificación de patógenos. Estructuralmente incorporan varias unidades de unas pequeñas proteínas de reconocimiento, denominadas 'Affitinas', alrededor de una nanoestructura de polímero ramificado que se llama dendrímeno. Mediante esta presentación se incrementa la afinidad de estas pequeñas proteínas de forma exponencial.
De este modo, el proyecto 'Affidendrones anti-SARS-CoV-2: herramientas multivalentes para diagnóstico temprano y terapia antiviral covid-19' pretende desarrollar 'Affidendrones' que reconozcan la proteína 'spike' en la superficie del virus.
VACUNA EN FERMENTOS
El desarrollo de una vacuna recombinante basada en péptidos multiepitopos contra el SARS-CoV-2 es el eje del proyecto coordinado por José Manuel Leiro Vidal del Instituto de Investigación en Análisis Químicas e Biolóxicas (Iaqbus) y que tiene como título 'Diseño y síntesis de proteínas recombinantes superficiales quiméricas del virus SARS-CoV-2 para la producción de una vacuna en fermentos'.
"Esta vacuna se producirá en un sistema de expresión de proteínas heterólogas en fermentos de uso alimentario para mantener la antigenicidad de los azúcares presentes en las proteínas superficiales del virus", explica Leiro Vidal.
La ventaja de esta vacuna frente a las que se están desarrollando actualmente es su "seguridad", ya que es teóricamente "inocua", "debido a que carece de toda posibilidad de infectividad y tampoco presenta ningún material genético que pudiese producir cualquier fenómeno de interferencia con genes celulares humanos, como es el caso de las vacunas genéticas basadas en la inmunización con ARN".
ANTIVIRALES
El proyecto liderado por la investigadora de CiQUS, Concepción González Bello, estudiará a nivel molecular como se produciría la "desactivación" de la respuesta inmune utilizando herramientas computacionales y biotecnológicas.
Los fármacos contra la malaria, cloroquina e hidroxicloroquina, son aminoquinolinas que podrían ser eficaces frente al virus de la covid-19. En esta línea, el equipo investigador analizará el potencial de otras aminoquinolinas, estructuralmente análogas a las anteriores.
La ventaja de esos nuevos "agentes virales" es su potencia, lo que ayudaría a reducir, en gran medida, los posibles efectos adversos por utilizarse en dosis más reducidas, señala González Bello, investigadora principal del proyecto 'Nuevos agentes antivirales basados en aminoquinolinas pra el tratamiento de la pandemia actual por SARS-CoV-2'.
