Actualizado: miércoles, 15 enero 2014 10:54
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LUGO, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -

   El detenido acusado de matar a su mujer y su suegra en el municipio de Cervo (Lugo) presta declaración este miércoles en el cuartel de la Guardia Civil de Burela, a la espera de pasar a disposición judicial en las próximas horas.

   Según han informado fuentes de la investigación, el hombre, que confesó ser el autor de los hechos en el momento de su detención, permanece declarando ante los investigadores antes de pasar a disposición judicial en Viveiro.

   José Antonio C.F., de 52 años, ha sido detenido como presunto autor de la muerte de su mujer, de 45, y su suegra, de 72, en el municipio lugués de Cervo. El arresto se ha producido después de que el hombre se diese a la fuga y su vehículo fuese localizado en el puente que une Galicia con Asturias.

   Tras ser detenido el hombre dijo haber atacado a su suegra con un palo y a su mujer con un palo y con un cuchillo, con el que dijo haberle provocado una herida en el cuello.

   La Guardia Civil alertó del hallazgo de dos cadáveres con signos de violencia sobre las 13.15 horas de este martes. Madre e hija se encontraban en sus domicilios, en viviendas contiguas en la parroquia de Riocobo de San Cibrao que conforman la misma unidad residencial. En concreto, una de las víctimas estaba boca abajo en el suelo y la otra en la cama en la misma posición.

   Los investigadores han confirmado, tras recabar pruebas, que su muerte se produjo tras ser golpeadas con un palo. En concreto, fuentes de la investigación señalan que el arma del homicidio fue una estaca y que la mujer de 72 años recibió un golpe frontolateral en la cabeza y la de 45 fue apaleada, además de tener signos de que le apretaron el cuello.

   El individuo, José Antonio C.F., de 52 años de edad, fue arrestados en la tarde del martes cerca de donde fue localizado su vehículo, en la parte asturiana del puente que une esa comunidad con Ribadeo (Lugo). No ofreció resistencia en el momento de la detención y fue trasladado a dependencias de la Guardia Civil en Burela.