Defensa abre un expediente al cabo que denunció "negligencia" en la muerte de dos marinos de una fragata en Ferrol

Actualizado: miércoles, 21 mayo 2008 22:19

El cabo se muestra dispuesto a "cualquier medida de presión" porque cree que la Armada "está sucia y hay que limpiarla"

FERROL, 21 May. (EUROPA PRESS) -

El Ministerio de Defensa ha abierto un expediente disciplinario al cabo Jorge Miguel Gago Chao, que denunció que la muerte de dos marinos en una explosión en la sala de calderas de la fragata 'Extremadura' se produjo por una gestión "negligente".

El documento remitido a Gago Chao de forma "urgente" por el Ministerio de Defensa y la Armada del Arsenal de Ferrol, y firmado por el capitán auditor instructor L. Insua Meirás, notifica la incoación del expediente disciplinario y le cita para declarar a las 12:00 horas del próximo viernes 23 de mayo en las oficinas de la Asesoría Jurídica de la Armada de Ferrol, en el Arsenal Militar.

Según explicó a Europa Press Gago Chao, el expediente se basa en el régimen disciplinario de las fuerzas Armadas y se abre por "hacer reclamaciones, peticiones o manifestaciones contrarias a la disciplina o basadas en aseveraciones falsas" a través de los medios de comunicación social o con carácter colectivo. Esto se considera una falta grave, que según aseguró el cabo Gago, podría suponer arresto domiciliario o hasta prisión en acuartelamiento o en penal.

El cabo ya había denunciado ante la Policía Nacional la existencia de presiones por parte de la Armada y "represalias" para evitar que difundiese en los medios de comunicación los detalles del accidente de la fragata 'Extremadura', en el que murieron los marineros Francisco Javier Pérez Castrillón y Erik Noval, en diciembre de 2005.

MANOS NEGRAS.

A principios de este mes de mayo, el cabo había tenido acceso a un documento, facilitado de forma "anónima", en el que un capitán de fragata del Arsenal Militar se dirigía a sus superiores informándoles de la aparición de Gago en un programa de televisión local, en el que había relatado detalles del accidente y acusado a la Armada de "deficiencias en el mantenimiento de dichas fragatas así como en la actuación de sus jefes, previa y posterior al accidente".

En este documento de "distribución interna", el capitán de fragata afirmaba que las declaraciones del cabo se desarrollaron en "un tono agresivo e irrespetuoso con la Armada". Por todo ello, informaba a sus superiores de los hechos "a los efectos que considere oportunos".

La apertura ahora del expediente disciplinario se deriva, a juicio de Gago Chao, de este anterior documento y demuestra "las manos negras" que están intentando hacerlo "callar". Ante esto, asegura que el viernes explicará al capitán auditor instructor "todo" lo sucedido hasta el momento. "Le voy a explicar que por querer decir la verdad y que hubiese transparencia y verdad en el accidente no estoy dispuesto a callarme y a acatar las supuestas normas que ellos quieren sacar", manifestó.

MEDIDAS DE PRESIÓN.

Si el expediente finaliza en arresto, Gago asegura que se demostrará que la Armada "está sucia y que hay que limpiarla", algo que de momento no le hará parar en sus denuncias. "Estoy dispuesto a hacer cualquier medida de presión, encadenarme o hacer una huelga de hambre, lo que sea", proclamó.

El cabo Gago Chao, con 14 años de servicio en la Armada y cinco condecoraciones, había estado destinado cuatro años en la caldera de la fragata 'Extremadura', recordó que el día del accidente estaba de guardia. Aseguró que esa noche llegó a alertar, "casi irrespetuosamente" y "hasta en seis ocasiones" a sus superiores de que el nivel de contaminación por cloro en las calderas había superado en diez veces los niveles permitidos y que era preciso parar su funcionamiento.

A pesar de sus advertencias, denunció que no se adoptó ninguna decisión e insistió en la "negligencia" con la que actuaron los altos cargos el día del accidente. Tras la explosión de las calderas, denuncia que sus superiores les ordenaron guardar silencio sobre lo ocurrido y que incluso desaparecieron documentos que demostraban los excesivos niveles alcanzados por la caldera.

Sus declaraciones han reabierto las diligencias que instruye el Juzgado Togado militar de A Coruña desde 2006, tras la demanda presentada por las familias de las víctimas. En la actualidad, el cabo, destinado en el buque 'Galicia', se encuentra de baja psicológica.