La eólica advierte que en Galicia el perjuicio será "especialmente grave"

MOLINOS VIENTO EÓLICA ENERGÍA RENOVABLE
Foto: EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 10 junio 2014 19:22
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Carga contra la Xunta por no haber "sabido" defender "de forma efectiva" los intereses del sector

   SANTIAGO DE COMPOSTELA, 10 Jun. (EUROPA PRESS) -

   La Asociación Eólica de Galicia (EGA) advierte de que el "perjuicio" que provocará el real decreto sobre energías renovables será "especialmente grave" en Galicia, ya que la reforma resulta "muy lesiva para las instalaciones promovidas con anterioridad a 2005", como es el caso de la comunidad, que "se ve así castigada por su carácter innovador y puntero en el desarrollo de un sector económico que llegó a generar un PIB autonómico superior al lácteo o al conservero".

    En un comunicado de prensa remitido el mismo día que otro de la Asociación Empresarial Eólica (AEE), la eólica gallega critica que, frente a "la paulatina destrucción del sector eólico gallego", la Xunta de Galicia "no ha sabido defender de forma efectiva los intereses del sector".

   "Otros gobiernos autonómicos --incluidos algunos del Partido Popular y otros con una potencia eólica instalada mucho menor a la nuestra-- como Andalucía, Extremadura, Murcia y Cataluña plantearon recursos de inconstitucionalidad ante el Tribunal Constitucional", indica, antes de reprobar que el Ejecutivo de Núñez Feijóo "prefirió evitar cuestionar de forma abierta las bases de la reforma y optar por la apertura de mesas de negociación con el Ejecutivo central (las llamadas comisiones bilaterales) que, hasta la fecha, no han fructificado, como se confirma con la aprobación del nuevo Real Decreto".

   "Y es que los errores de la reforma energética no están en la letra pequeña, que también, sino en aspectos de profundo calado, como la aplicación de medidas injustas y retroactivas que quiebran la confianza jurídica y que, lejos de resolver los problemas del sector, supondrán un mayor coste para todos los ciudadanos, por cuanto las premisas de partida son equivocadas", asevera.

   La reforma energética, a su juicio, "desgraciadamente es un hecho que sólo pueden corregir las instancias judiciales, las cortes arbitrales internacionales o, en su caso, un cambio radical en la política energética del Gobierno". "Y, aunque en un futuro los tribunales terminen corrigiendo los aspectos más lesivos de la reforma, el presente del sector requiere de una actuación proactiva y decidida por parte de la Administración, con medidas y decisiones industriales, fiscales, administrativas e incluso políticas, en una defensa cerrada e inequívoca del sector eólico", apostilla.

"SERÁ DESAUTORIZADA POR LOS TRIBUNALES"

   La asociación se muestra, así, convencida de que la reforma "no se ajusta a derecho y que tarde o temprano será desautorizada por los tribunales y por las diferentes cortes arbitrales internacionales a las que reiteradamente están acudiendo los distintos inversores extranjeros que buscan ser resarcidos de los perjuicios provocados por las medidas injustas y discriminatorias que el Gobierno pretende aplicar con carácter retroactivo".

   "Y aunque en el sector se da por sentado que dichos recursos supondrán el reconocimiento último de la ilegalidad de la reforma, ello no evitará la producción de daños colaterales por el camino y un perjuicio irreparable para las empresas y para la sociedad en su conjunto", alerta.

   Sentencia que el real decreto de energías renovables "consolida el proceso legislativo de la mal llamada reforma eléctrica y evidencia, una vez más, que el Gobierno español nada contra la corriente mundial de promover y fomentar el uso de las energías renovables".

"FALSEDADES Y MEDIAS VERDADES"

   "Este proceso reformista se ha sustentado y justificado en la reiteración hasta la saciedad de falsedades y medias verdades, apoyadas en campañas mediáticas interesadas, tratando de responsabilizar al sector eólico de la generación del llamado déficit de tarifa. Sin embargo, los hechos son lo que son y una falsedad, por mucho que se repita, nunca llega a convertirse en verdad", censura la asociación.

   EGA reitera que el eólico es un sector competitivo "que no supone en modo alguno sobrecostes al sistema eléctrico". "Muy al contrario, se ha demostrado lo que esta asociación empresarial lleva defendiendo desde hace mucho tiempo: sin ningún género de dudas, a mayor producción eólica, más barato es el recibo de la luz para el ciudadano", asegura. Pese a ello, lamenta que "la tecnología eólica ha sido la más castigada por la reforma".

   Además, entiende que "convendría recordar que en un escenario de inestabilidad en el abastecimiento energético y en una creciente preocupación de los Estados europeos por minimizar el impacto de la dependencia energética exterior, solo el fomento de una energía autóctona como la eólica puede limitar la dependencia externa, que en España alcanza cotas del 70%".

"GRAVE ERROR POLÍTICO"

   Precisamente por ello, afirma que "no alcanza a comprender las razones que sustentan el grave error político cometido", que augura que "provocará el cierre y la parada de instalaciones eólicas y, por tanto, dado que la reforma eléctrica supondrá una menor contribución futura de las energías renovables, el recibo de la luz, sin duda alguna, tenderá a la alza".

   "La mal llamada reforma eléctrica tendrá consecuencias negativas concretas que no sólo perjudicarán a las empresas eólicas gallegas, sino también a sus proveedores, al sector auxiliar, a los propietarios del suelo donde se asientan los parques, a los ayuntamientos, a la hacienda pública, a los trabajadores y, en especial, a los consumidores y a la industria, que habrán de soportar nuevas subidas de la luz y, consecuentemente, de sus costes de producción", censura. EGA teme que "a finales de este mismo año" se pueda percibir ya este efecto, generado por la nueva regulación aprobada.

   "En lugar de atajar las verdaderas ineficiencias del sistema eléctrico", sostiene, el Ejecutivo central "ha perdido una gran oportunidad de realizar una verdadera reforma del sistema energético español en su conjunto y se ha limitado a desarrollar un difícil escenario que no solo pone en el camino del cierre a las instalaciones eólicas en explotación, sino que cuestiona la viabilidad de futuras instalaciones".