Revela que el paisaje gallego uno de los reclamos de atracción turística, pero ve insatisfacción en los habitantes de las reservas
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 12 Mar. (EUROPA PRESS) -
Un estudio del Centro de Investigación Económica y Financiera de Caixa Galicia calcula que las pérdidas económicas sufridas por Galicia en la vaga de incendios de 2006 fueron de entre 248 y 336 millones de euros, de los que casi 40 corresponden a daños medioambientales.
El resto se refieren a pérdidas económicas directas ocasionadas por aquella catástrofe --el 4,6% de la superficie forestal de Galicia resultó afectada por los incendios de 2006 con más de 93.000 hectáreas quemadas--, como pérdida de turismo, masa forestal quemada, emisión de CO2, pérdida de biomasa o gastos en materia de extinción.
Esta es una de las principales conclusiones del estudio, realizado por las investigadores María Loureiro García y Melina Barrio Martínez, que analiza el valor económico del paisaje gallego, a partir de su riqueza forestal y del potencial de desarrollo de sus cuatro reservas de la biosfera.
Con todo, el balance de daños de los incendios no cuantifica económicamente otros efectos directos de los incendios, como las pérdidas por las inundaciones posteriores o por contaminación fluvial y marítima.
Tampoco incluye las pérdidas en especies no inventariadas, como castañas o setas, o la pérdida de biodiversidad. Igualmente, no existe aún la posibilidad de medir científicamente los daños económicos de medio plazo, como el de la caída del precio de la madera por sobreoferta de la madera quemada.
RIQUEZA PAISAJÍSTICA DE GALICIA
Bajo el título 'Valoración medioambiental, cultural y paisajística de los espacios rurales gallegos', el estudio también pone de relieve la riqueza paisajística de la comunidad, cuyo 20 por ciento del territorio es Reserva de la Biosfera.
En base a esta particularidad, las autoras consideran el paisaje gallego uno de los mejores reclamos de atracción turística. Como ejemplo, ponen que en diciembre de 2006 el 41,8 por ciento de las pernoctas turísticas españolas se concentraron en Galicia.
También aluden a un sondeo que asegura que los visitantes estarían dispuestos a pagar una tarifa extra de hasta 32 euros diarios por visitar entornos como el de los Cañones do Sil.
El informe también descubre cierto grado de insatisfacción por parte de los habitantes de la reserva natural Eo, Oscos y Terras de Burón, que perciben las medidas proteccionistas más como afectados que como beneficiarios.
En la actualidad existen en Galicia cuatro zonas declaradas Reserva de la Biosfera: Terras do Miño, Área de Allariz, Os Ancares lucenses y Montes de Navia, Cervantes y Becerreá; y Río Eo, Oscos y Terras do Burón. Además, está en tramitación proteger el paisaje de la Ribeira Sacra.
