La familia del parricida de Cambre (A Coruña) rechaza la denuncia del acusado en la que culpa a su padre de malos tratos

Actualizado: lunes, 26 junio 2006 21:40

La Policía Judicial asegura que el imputado estaba "muy tranquilo" y que "era consciente" de todo lo que pasaba

A CORUÑA, 26 Jun. (EUROPA PRESS) -

La familia del vecino de Cambre (A Coruña) A.G.G., de 36 años, que mató a su padre asestándole 34 puñaladas, negó hoy rotundamente las acusaciones de éste en las que alegó que era víctima de malos tratos por parte de su progenitor. Tanto la madre del acusado, como sus tres hermanos, declararon que el fallecido era "un hombre bueno, preocupado por su familia y cariñoso", y que las "únicas disputas" que podían tener lugar venían motivadas por la adicción a las drogas del acusado.

En cuanto al acusado, todos los familiares coincidieron en definirlo como una "persona normal, muy inteligente, tranquilo y reservado", aunque pusieron de relieve su "personalidad interesada". "Sólo te hablaba cuando quería algo de ti, sino le interesabas simplemente no se comunicaba contigo", afirmó una de sus hermanas. Además, toda la familia negó que en algún momento les hubieran informado de que su hermano padecía algún tipo de enfermedad mental.

Hoy prestó declaración durante la segunda sesión del juicio que tiene lugar en la Audiencia Provincial de A Coruña la familia del acusado, además de los agentes de la Policía Local de Cambre (A Coruña) y Guardia Civil, que se desplazaron hasta el lugar de los hechos el 28 de febrero de 2005 cuando se cometió el asesinato.

HECHOS

La madre, visiblemente afectada, declaró que al llegar al domicilio acompañada de su marido y de su hijo, se dirigió a la cocina ha hacer la comida como cualquier otro día. Fue allí cuando oyó la voz de su marido que la llamaba con un tono que le hizo sospechar que quizás le estaba ocurriendo algo.

Subió a la planta superior de la vivienda y fue cuando descubrió a su hijo apuñalando a su padre. La mujer trató se arrebatarle el cuchillo agarrando la hoja con la mano, lo que le provocó una herida profunda. Tras forcejear, los tres cayeron al suelo, se pusieron nuevamente en pie y la madre intentó proteger a su marido interponiendo una silla entre su hijo y él. Aún así, A.G.G. continuó apuñalando a su padre hasta que este cayó al suelo, donde prosiguió su agresión.

La madre, al ver que su hijo no se detenía en su intento de matar a su padre, procuró llegar hasta un teléfono cercano pero A.G.G. se lo impidió. "Me dejó llamar cuando comprobó que su padre estaba ya muerto", afirmó la mujer.

"CABIZBAJO Y PENSATIVO"

Por su parte, los agentes de los distintos cuerpos policiales que intervinieron en el suceso, resaltaron la tranquilidad de A.G.G. en el momento en que llegaron a la casa. Todos declararon que estaba "de cuquillas en el pasillo, cabizbajo y pensativo". Incluso, fue él mismo por voluntad propia quien se levantó y extendió los brazos para que le pusieran las esposas.

El agente de la Policía Judicial que le tomó declaración en un primer momento destacó que estaba "muy tranquilo" en comparación de otras personas en su misma situación, y añadió que pensaba que era consciente de todo lo que estaba pasando.

En la jornada de mañana prestarán declaración los médicos forenses implicados en el caso entre otros testigos. Fuentes judiciales estimaron que mañana por la tarde se puede conocer el veredicto del jurado popular, que emitirá tras escuchar a todos los implicados y realizar la consiguiente deliberación.