Feijóo abre la puerta a incluir en su gobierno personas que no voten PP para primar capacidad sobre ideología

Actualizado: viernes, 27 febrero 2009 15:54

Propone abrir una "reflexión legal" para limitar los mandatos y no es partidario de "segregar" a los alumnos por razón de lengua

VIGO (PONTEVEDRA), 27 Feb. (EUROPA PRESS) -

El líder del PP gallego y candidato a la Presidencia de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, se mostró hoy partidario de primar la "capacidad, el mérito y las ganas de trabajar" sobre la ideología a la hora de conformar un ejecutivo, por lo que dejó abierta la posibilidad de incorporar a su gobierno personas que no sean votantes del Partido Popular si logra la mayoría absoluta el próximo domingo.

"No le voy a preguntar a nadie cuál es su ideología", garantizó Feijóo y, aunque matizó que su gobierno "será del PP", expresó su "interés" en contar "con los mejores" y, por tanto, con personas "independientes" que tengan formación y conocimiento que pueden ser "útiles" a Galicia.

De este modo se pronunció tras un desayuno con los medios de comunicación en el último día de campaña, en el que justificó esta última propuesta por la necesidad de "sumar", "unir" y "compartir esfuerzos", al margen de las ideologías, dada la actual situación de crisis económica.

En este sentido, volvió a lanzar el mensaje sobre el que ha girado buena parte de sus mítines de campaña y, así, proclamó que gobernará "sin siglas" porque su "voluntad" es hacer un ejecutivo "para todos". "En el que se sientan cómodos tanto los votantes del PSOE como los del BNG", apostilló y, al hilo de esto, también apostó por llegar a "consensos" con el resto de las fuerzas políticas.

"CAMBIO A MEJOR"

"Necesitamos un gobierno especial para un momento especial", resolvió, y expresó su "compromiso personal" con este objetivo, que a su entender, ya ha demostrado durante la campaña electoral. Así, opinó que, mientras el mensaje de socialistas y nacionalistas a lo largo de los últimos quince días ha sido "Feijóo", el suyo fue "Galicia, Galicia y Galicia".

Puesto que ha presentado propuestas "sin desfallecer", el actual líder de la oposición concluyó que el PP es la "única alternativa" al bipartito, que, a su juicio, ofreció un "cambio decepcionante" a la sociedad. Frente a esto, prometió "un cambio a mejor" que pretende girar sobre "cinco obsesiones": la creación de empleo, una mayor austeridad, la bajada de impuestos, servicios sociales de calidad y la renovación y regeneración democrática.

Los que serán sus objetivos de gobierno centraron también, según Feijóo, su campaña electoral, de la que se mostró "satisfecho", y que cerrará esta tarde en Lugo, primero, y en Ourense, después. Feijóo justificó la elección de las provincias del interior para lanzar su último mensaje antes de que los gallegos acudan a las urnas, convencido de que la "posibilidad real" de lograr la mayoría absoluta pasa por mantener los resultados en ambos territorios.

PRESENCIA DE ZAPATERO

Preguntado por el hecho de que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, haya decidido participar en el mitin de cierre de los socialistas gallegos, Feijóo le dio la "bienvenida" y confió en que, además de "criticar", visite Galicia con "propuestas concretas". Aunque prefirió no evaluar que el jefe del Ejecutivo esté en el cierre de campaña, sí enfatizó que a lo largo de la campaña algunos días han coincidido "hasta cinco ministros".

A pesar de esto, Feijóo se mostró optimista y señaló a Europa Press que el actual escenario político es más favorable para el PP que el de hace cuatro años, seguro de que durante esta legislatura el partido de la oposición ha sido "más útil" a una "Galicia moderna y distinta" que "los dos partidos que se repartieron" la Xunta.

"Nunca he visto tanta gente en la calle, tanta gente en los actos, tanta esperanza", expuso, además de considerar que tanto el partido como él mismo están en su "mejor momento". En este sentido, reconoció que su ilusión como debutante --es la primera vez que concurre como candidato-- "no es la misma" que la de "personas que lo han conseguido todo", en alusión al ex presidente de la Xunta Manuel Fraga.

"ARREPENTIMIENTO DIFICIL DE CREER"

Con todo, elogió el "balance real" del Gobierno Fraga porque "tiene más luces que sombras" y porque "con carácter general" su gestión fue "correcta". "Y claro, cuando se compara con el bipartito, los gallegos no pueden tener ninguna duda", añadió.

En este sentido, admitió que en las autonómicas de 2005 el PP "se enfrentaba" a 16 años de Gobierno y a un PSOE "emergente", mientras que en esta ocasión los populares concurren a las elecciones después de haber hecho "muchos deberes de renovación y de rectificación" y frente al "responsable" del "desmoronamiento" de le economía, como se refirió al Partido Socialista.

De esta manera, desacreditó el "arrepentimiento de las últimas 72 horas" del bipartito, al que reprochó su "soberbia" durante toda esta legislatura. Como prueba de ello, puso las alusiones del líder socialista y candidato a la reelección, Emilio Pérez Touriño, a la "imposición lingüística", y lo consideró "difícil de creer" después de haberla "permitido" durante la legislatura.

CONTRA LA SEGREGACIÓN

A este respecto, reiteró su compromiso con el bilingüismo y rechazó segregar a los escolares por razón de lengua, como ha hecho el bipartito, según denunció. "Si hay alguien que por primera vez en la historia ha segregado en la educación es el actual gobierno", reprochó, y se preguntó: "¿si hiciésemos lo mismo con el castellano estaríamos segregando y si lo hacemos con el gallego no?".

Por otro lado, se mostró partidario de los mandatos limitados, por lo que defendió abrir "una reflexión a nivel legal en España" en este sentido, convencido de que "autoacostumbrarse a ser presidente de una comunidad es una costumbre peligrosa". Con todo, "mientras la ley lo permita", expresó su "respeto" a "cualquier decisión", tanto la de permanecer en el Gobierno durante un periodo determinado, como hizo, por ejemplo, el ex presidente del Gobierno José María Aznar; como la de prolongar los mandatos de forma ilimitada, como el propio Fraga.

En su caso particular, descartó concretar el tiempo que estaría al frente de la Xunta y, para ello, apeló a la "modestia". "Es poco razonable autolimitarse a algo que aún no se ha conseguido", reflexionó, aunque se mostró muy optimista respecto a la victoria electoral, una posibilidad que ve "de verdad" al alcance de la mano.