Touriño presidirá la delegación de la Xunta y estará acompañado por cinco conselleiros, cuatro menos que en 2006
SANTIAGO DE COMPOSTELA/OVIEDO, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -
La VIII Cumbre Asturias-Galicia que se celebra entre mañana y el sábado en Oviedo analizará cuestiones "de interés mutuo" para las dos comunidades, como el impulso de las infraestructuras, la protección del territorio y la revisión de la financiación autonómica, por cuanto los dos territorios comparten similares características y aspiran a que la evolución del Estado de las Autonomías garantice la solidaridad interterritorial y la cohesión social.
Las comunidades vecinas retomarán así las relaciones institucionales que se comprometieron a consolidar el año pasado con motivo de la celebración en Santiago de Compostela del VII cónclave bilateral, el primero en siete años, en el que acordaron promover un foro de colaboración estable que redunde en el interés de ambas autonomías.
En este sentido, entre las cuestiones capitales que defenderá la Xunta figura la protección del litoral, por la coincidencia de objetivos en materia de ordenación territorial, que confieren a la cita una "especial relevancia" para adquirir "compromisos para lograr un espacio protegido", según el presidente gallego, Emilio Pérez Touriño.
De igual modo, Galicia incidirá en la necesidad de agilizar las infraestructuras y la apuesta por el desarrollo sostenible, que defenderá en las siete mesas sectoriales que compondrán este séptimo cónclave bilateral, al que, además de Touriño, asistirán cinco conselleiros, cuatro menos que en 2006, cuando también había concurrido el vicepresidente de la Xunta, Anxo Quintana, ausente en esta ocasión.
DELEGACIÓN GALLEGA
La delegación gallega estará representada por su presidente y los titulares de Economía, José Ramón Fernández Antonio; de Política Territorial, María José Caride; de Medio Rural, Suárez Canal; de Cultura, Ánxela Bugallo; y de Medio Ambiente, Manuel Vázquez.
Los cinco repiten concurso, mientras que, las áreas no representadas por un conselleiro, contarán con la participación de diversos directores xerais de los departamentos implicados, que se sumarán a otros altos cargos colaboradores de los cinco responsables que estarán presentes en Oviedo.
Así, la cumbre, que se celebrará en el Hotel Reconquista de la capital de Asturias, contará con la participación de delegaciones de ambas comunidades autónomas y la estructura de mesas será muy similar a la del cónclave anterior.
Los más de 70 miembros de las dos administraciones tomarán parte en sesiones de trabajo articuladas en foros sectoriales, en los que tratarán de aprobar entre la tarde del viernes y la mañana del sábado una serie de conclusiones en materias como las infraestructuras, la mejora de la administración, la cultura, el turismo o el impulso al medio rural.
MESES DE TRABAJO
Su preparación ha implicado meses de trabajo, como se habían comprometido ambos ejecutivos en la cita de enero de 2006, primero con encuentros sectoriales para analizar el seguimiento de los acuerdos alcanzados en Santiago y, posteriormente, para preparar específicamente las cuestiones de la nueva cumbre.
De esta forma, los próximos viernes y sábado se evaluarán los términos pactados en el séptimo cónclave y se plantearán nuevas propuestas de actuación conjunta. Para ello, los equipos sectoriales analizarán la modernización y la mejora de la administración; políticas de igualdad; cultura y turismo; educación y universidades; investigación, desarrollo tecnológico e innovación; medio rural; y pesca y asuntos marítimos.
Tras las sesiones de trabajo, se celebrará un pleno en el que se redactarán las conclusiones del encuentro, si bien gran parte de los acuerdos que incluyan no se formalizarán con la firma de un texto estas jornadas, sino que encontrarán su materialización a partir de la continuidad anual que pretenden conferir a este foro, para "trabajar sobre lo construido" y consolidar una "colaboración de interés mutuo hasta ahora no producida".
Asimismo, tanto el Gobierno gallego como el del Principado pretenden aprovechar la "sintonía política y personal" que une a los dos presidentes no sólo para potenciar las relaciones, sino que también para tratar de lograr objetivos concretos de carácter común.
ORÍGENES
El origen de esta cumbre bilateral se remonta a 1988, cuando los presidentes socialistas Pedro de Silva, de Asturias, y Fernando González Laxe, de Galicia, se reunieron en el municipio asturiano de Taramundi. El año siguiente, ambos mandatarios se reunieron en la localidad gallega de Sargadelos y, en 1990, Pedro de Silva se citó de nuevo en Taramundi pero, en esta ocasión, con cambio de interlocutor, puesto que por parte de la Xunta se presentó su nuevo titular, el popular Manuel Fraga.
En 1992, en Ribadeo el estreno correspondió al dirigente asturiano, Juan Luis Rodríguez-Vigil, también del PSOE; y otra vez Manuel Fraga. No obstante, hasta 1996 no volvió a producirse un encuentro, en Oviedo, nuevamente protagonizado por Fraga y un nuevo recambio por parte del Principado, Sergio Marqués, del mismo partido que su homólogo gallego, el PP.
La siguiente cumbre se produjo en Taramundi, en 1999, y reunió al actual presidente asturiano, el socialista Vicente Álvarez Areces y otra vez a Manuel Fraga; mientras que la última cumbre se produjo el año pasado en Santiago de Compostela entre Areces y Touriño, en la que se acordó establecer una periodicidad anual, alternándose las sedes entre ambas comunidades autónomas.
