El Consello de Contas encuentra "deficiencias" en casi todos los entes locales analizados individualmente y pide "medidas urgentes"
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 13 Sep. (EUROPA PRESS) -
La gran mayoría de los ayuntamientos gallegos mantiene presupuestos "muy reducidos" y registran las cifras medias más bajas de ingresos por habitante del total estatal, no alcanzando el 68% de la cifra media de ingresos de los municipios españoles en 2003, según el Consello de Contas.
En la fiscalización de la cuenta general de las corporaciones locales en el citado ejercicio, el órgano denunció que la rendición de cuentas que llevan a cabo las entidades locales gallegas "sigue siendo deficiente" y menos del 10% de las 391 entidades locales básicas aprobaron los presupuestos de 2003 en plazo.
Los conselleiros de contas también detectaron un elevado número de modificaciones de crédito, lo que "evidencia una deficiente técnica presupuestaria". Además, las cuentas se aprueban y se rinden fuera de los plazos previstos y, de hecho, un 30% de los ayuntamientos no rindieron sus cuentas antes de final de año.
Asimismo, se comprueba la existencia de siete mancomunidades de municipios y siete organismos autónomos dependientes de municipios que no tienen actividad o carecen de presupuesto independiente, a cuyos responsables el Consello de Contas recomendó que "estudien la viabilidad de las mismas o, en su caso, procedan a su disolución".
En ese sentido, el órgano fiscalizador también hizo un llamamiento a los poderes públicos de Galicia para que "consideren y valoren" la especial situación del sector público local gallego, "a fin de reforzar las organizaciones y conseguir una gestión más eficiente de los servicios públicos".
CAJA DE LA DIPUTACIÓN DE PONTEVEDRA
Entrando en el análisis individualizado, el Consello de Contas fue especialmente crítico con el Organismo Autónomo Caixa de Anticipos de la Diputación de Pontevedra, en el que observó que la concesión de anticipos "no se realiza a través de una convocatoria pública", lo que no permite garantizar que la totalidad de los ayuntamientos de la provincia conozcan las condiciones y requisitos para acceder a esta financiación.
Asimismo, no se fijan criterios explícitos para la concesión de los anticipos solicitados, "lo que podría derivar en decisiones arbitrarias". También se dan préstamos que incumplen los límites de porcentaje máximo y de la cuantía absoluta establecidas en las bases de la Caixa y se dan otros para obras y servicios que no son susceptibles de financiación.
Además, se detectaron "deficiencias" en la justificación de algunos anticipos y se verificó la ausencia de algunos de los documentos exigidos. Ante todo ello, el consello pidió a los responsables del organismo autónomo que corrijan estas deficiencias o acuerden su disolución e integren su actividad dentro de la organización general de la Diputación.
AYUNTAMIENTOS
Sin embargo, las mayores "deficiencias" se encuentran en los 18 ayuntamientos de las provincias de Lugo, Ourense y Pontevedra analizados individualizadamente, debido a que en los últimos años han eludido presentar sus cuentas para ser fiscalizadas. Así, en la gran mayoría de ellos el Consello de Contas exige que se arbitren "con urgencia" las medidas necesarias para cumplir con sus obligaciones, o "adoptará las medidas que estime más oportunas para su efectiva e inmediata corrección".
Así, en el caso del municipio ourensano de A Porqueira se apreciaron deficiencias y la inexistencia de un control interno de carácter efectivo. Entre otras, "la selección del personal laboral temporal conculca los principios constitucionales de igualdad, mérito y capacidad", ya que los candidatos son designados sin proceso de selección y "en virtud de decreto de la Alcaldía".
También se vulneran artículos de la ley de incompatibilidades y la percepción establecida para la alcaldesa, Susana Vázquez, carece de cobertura legal y podría incurrir en supuestos de nulidad.
SITUACIÓN SIMILAR
El caso de Porqueira no es excepcional y las deficiencias e incluso "negligencias" se suceden también en los municipios ourensanos de A Bola, Bande o Cortegada, por lo que el Consello de Contas les recomienda a la mayoría que soliciten asesoramiento a las diputaciones provinciales y les advierte de las "responsabilidades" que podrían acarrear sus incumplimientos.
En ese mismo sentido, el Consello de Contas realiza similares recomendaciones y emite un diagnóstico muy parecido en el caso de los ayuntamientos lucenses de Antas de Ulla, Cospeito, Triacastela, A Fonsagrada, As Nogais, Barreiros, Ribas de Sil, Cervo, Pol y O Sabiñao. Finalmente, la situación se repite en Rodeiro, Cuntis, Agolada y Marín (Pontevedra).
CASO MARINENSE
Éste último es el ayuntamiento más importante de los analizados de forma individual por el Consello de Contas, destacando el órgano que desde 1996 hasta 2003 se produjo un incumplimiento reiterado en cuanto a la obligación de rendir cuentas "por la falta de diligencia por parte de la Intervención y la Alcaldía", agravada además por "la reducción de efectivos en el departamento de fiscalización".
En ese sentido, no se corrigieron las irregularidades detectadas en otra auditoría del consello efectuada en 2001, "reincidiendo en la comisión de las mismas". Así, entre otras incidencias, se constató la realización de compromisos sin que conste la previa fiscalización de la existencia de crédito adecuado y suficiente.
También se verificó la práctica "irregular y reiterada" de presentación de facturas sin mediar la existencia de autorización de los órganos gestores del gasto, además de detectarse la imputación irregular a conceptos extrapresupuestarios del ejercicio de 2002 de cinco pagos correspondientes a facturas de 2001.
Asimismo, los procedimientos de selección de personal funcionario presentan "irregularidades" y así hasta una treintena de puntos en los que el órgano fiscalizador encontró deficiencias.
