Jóvenes retornados y comuneros hacen una cadena humana para pedir que se reduzcan los daños en bosques por obras del AVE

Souto de castaños en el inicio de obras para pistas
EUROPA PRESS
Actualizado: jueves, 9 agosto 2012 18:36

La Sociedade Galega de Historia Natural denunció el día 15 de julio la "destrucción de los últimos soutos de castaños" del lugar


OURENSE, 9 Ago. (EUROPA PRESS) -

El colectivo 'Salvad el bosque', integrado por jóvenes que veranean en los pueblos de Laza, organizó este jueves una cadena humana a la que se unieron varios comuneros para reclamar que las empresas responsables de las obras del trazado del AVE reduzcan los daños que provocan en los bosques de castaños de Cerdedelo las nuevas pistas de acceso que no estaban previstas en los informes del ministerio de Medio Ambiente.

La portavoz del colectivo, Isabel Noriega, ha explicado a Europa Press que un grupo de jóvenes descendientes de vecinos de Cerdedelo y residentes en Barcelona, Madrid, San Sebastián y París, vuelven cada año a su pueblo varias veces y decidieron constituirse como asociación al descubrir hace cuatro meses que comenzaban las obras para el tren de Alta Velocidad sin que antes pudiesen tener acceso a la información sobre ellas.

"Además, después de la aprobación del recorrido del AVE y de las obras complementarias como pistas de acceso y escombreras, las empresas responsables decidieron iniciar nuevas expropiaciones de terrenos cubiertos por bosques de castaños y que no estaban previstas en el informe inicial", ha explicado.

La Sociedade Galega de Historia Natural (SGHN) denunció el día 15 de julio la "destrucción de los últimos soutos de castaños de Cerdedelo" ante todas las instituciones competentes y reclamó la paralización de las obras que afectarían a castaños, nogales, álamos, abedules y otras especies vitales para los cauces de los ríos de montaña incluidos en el Lugar de Interés Comunitario (LIC) Río Támega, cuyo nacimiento se sitúa en la zona afectada por las obras.

Según Noriega, las nuevas expropiaciones fueron aceptadas y firmadas por los vecinos afectados porque "se trata de gente de edades entre 70 y 80 años que fueron al ayuntamiento a firmar porque allí se les dijo que o lo hacían así o tendrían que aceptar una expropiación forzosa y, por tanto, cobrar menos por sus terrenos".

TODO ES LEGAL PERO EL COLECTIVO PROPONE ALTERNATIVAS

Las nuevas obras previstas por las empresas son pistas que cruzan por bosques de castaños para llegar a los túneles del trazado, para acceder a escombreras previstas en el informe inicial o para abrir nuevos vertederos no previstos para almacenar escombros de las obras, y todas ellas pueden hacerse por parajes no ocupados por bosques centenarios, según la portavoz.

Noriega añadió que el tema "es delicado" porque además de firmar bajo presión, los propietarios no quieren enfrentarse a las empresas subcontratadas por las "grandes constructoras", como Sacyr, que tienen adjudicado cada tramo, pues se trata de pequeñas empresas de los pueblos cercanos a Cerdedelo donde trabajan vecinos de toda la vida.

Entre las "presiones" ejercidas sobre los propietarios de los terrenos y bosques, según Noriega, intermediarios de las empresas les propusieron que firmasen las expropiaciones para una nueva escombrera cercana al pueblo a cambio de que los camiones de las obras fuesen desviados de un lugar de recreo vecinal a otra pista más alejada de las viviendas.

LOS COMUNEROS TAMBIÉN PROTESTARON

En la cadena humana se unieron finalmente, según explicaron a Europa Press fuentes vecinales, un centenar de personas, entre las que se encontraron jóvenes de todos los pueblos vecinos a Cerdedelo, como Campobecerros, Laza o Matamá, y comuneros propietarios de terrenos expropiados.

El presidente de los comuneros, Baltasar Rivero, explicó que nadie está contra las obras del AVE pero sí contra las maniobras empresariales posteriores que provocan daños irreversibles en los últimos bosques de castaños centenarios de la zona.

La marcha vecinal estuvo escoltada por tres parejas de la Guardia Civil, discurrió de forma pacífica entre Cerdedelo y el aparcamiento de las máquinas excavadoras y coreó gritos como 'esto es un atraco', 'queremos nuestros castaños' o 'esto no es un túnel, es una autopista'.