SANTIAGO DE COMPOSTELA, 4 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno gallego no quiere símbolos políticos en los estadios. El secretario xeral para o Deporte, José Ramón Lete Lasa, ha considerado que la exhibición de banderas por parte del público durante los partidos, como la independentista gallega o con el símbolo diseñado por Castelao de 'Denantes mortos que escravos', choca con la concepción del deporte como "elemento de unión y cohesión social", por lo que resultan "incompatibles" con el ideal defendido por la Xunta para los estadios.
"Debemos primar el deporte como elemento de unión e integración", ha defendido, insistiendo en que en este espectáculos las banderas a enarbolar deben ser deportivas, "del mismo modo que no entenderían que respondiera a esta pregunta ataviado con una camiseta del Racing de Ferrol", ha trasladado Lete Lasa en respuesta a una cuestión formulada por Luis Bará, diputado del BNG.
Precisamente Bará ilustró su punto de vista con una 'estreleira', la bandera icónica del independentismo y nacionalismo gallego de izquierdas, que situó en su mesa durante la intervención, en la que ha denunciado que estos símbolos están siendo "sistemáticamente prohibidos" en algunos estados, con una "actitud represiva por parte de autoridades y clubes" respecto a una iconografía "que no es ilegal", citando casos como Pasarón.
El diputado nacionalista ha defendido la exhibición de estas banderas o el canto del himno gallego, por ejemplo, como "manifestaciones de la confraternización de la afición", incluso entre rivales como el Deportivo o el Celta, y en encuentros de baloncesto como el Breogán y el Obradoiro.
"NO ESTÁ PARA HACER POLÍTICA"
El responsable de Deporte ha argumentado que estos encuentros deben acoger a aficionados como "adversarios deportivos y contrincantes", como una actividad "directamente relacionada con un modo de vida saludable y la adquisición de valores de superación, lucha y el respeto a los demás" y que permite "juntar a personas de diversos credos y procedencias".
"No está para hacer política y usarlo partidariamente", ha matizado quien, aún trasladando su respeto por estos símbolos como manifestaciones "legítimas del pluralismo político", esto es "incompatible" con la idea de estados "para jugar fútbol, enfrentar aficiones y sentimientos". Por ello, ha defendido "salvaguardar la esencia del deporte" y que los valores de unión y cohesión "prevalezcan sobre los que nos separan".
A pesar de ello, ha recordado que este tipo de cuestiones "quedan fuera de las competencias de la Secretaría Xeral", dado que se trata de una materia de regulación Estatal.
