SANTIAGO DE COMPOSTELA, 9 Nov. (EUROPA PRESS) -
Los portavoces parlamentarios de los grupos de la oposición en el Parlamento gallego, Luís Villares (En Marea), Xoaquín Fernández Leiceaga (PSdeG) y Ana Pontón (BNG), han insistido en que la "prioridad" es paralizar el ERE de extinción anunciado por Alcoa para sus factorías de A Coruña y Avilés, ya que se trata de una "situación de urgencia" en la que "están corriendo los plazos".
Los portavoces, que este viernes han ofrecido una rueda de prensa conjunta en el Pazo do Hórreo, se ha referido a la noticia de que el Gobierno lanzará antes de final de año un paquete de medidas para ayudar a la industria electrointensiva a superar las dificultades del coste de la energía.
La medida fue anunciada el pasado jueves por la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, luego de mantener una reunión con los presidentes del Principado de Asturias, Javier Fernández, y de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo.
Además, el Gobierno y las instituciones autonómicas de ambas comunidades acordaron "unidad de acción" para pedir a la empresa la retirada del ERE extintivo para las dos plantas, que supone una amenaza para casi 700 puestos de trabajo, y para la creación de una mesa de trabajo "para plantear escenarios que permitan el mantenimiento de las fábricas y del empleo", según señaló Maroto.
Este viernes, el portavoz de En Marea, Luís Villares, ha apuntado que el objetivo principal de las administraciones debe ser paralizar el ERE anunciado por la empresa, ante la que no ha de cederse a "chantajes". Para ello, ha comentado que el expediente presenta "defectos de fondo y forma" en su tramitación que abren la puerta a que pueda ser tumbado.
Para el socialista Xoaquín Fernández Leiceaga, la situación es "de urgencia" pues "van corriendo los plazos del ERE", por lo que ha valorado la reunión del pasado jueves entre las tres administraciones de cara a conseguir una postura conjunta.
Por último, la líder frentista, Ana Pontón, ha llamado a articular "una imagen de unidad" entre los diferentes partidos y sindicatos de Galicia para paralizar el cierre de la planta de A Coruña; al tiempo que ha remarcado que "con el ERE encima de la mesa no se puede negociar nada".
