El regidor local (BNG) acusa a Louzán de instigar una coalición para "tratar de colgar un nuevo trofeo" para el PP, "un ayuntamiento más"
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 23 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los presupuestos de O Porriño (Pontevedra) quedaron hoy automáticamente aprobados tras fracasar el acuerdo entre los tres grupos de la oposición para presentar una moción de censura contra el alcalde, el nacionalista Raúl Francés, tras el plazo legal de un mes después de que fracasase la moción de confianza.
En declaraciones a Europa Press, el regidor local celebró esta aprobación, puesto que el ayuntamiento tenía los presupuestos prorrogados desde 2002 y, a su juicio, "un ayuntamiento dinámico necesitaba unos presupuestos acordes". "Eran indispensables y jugamos la baza de la moción de la confianza ante la oposición", explicó e informó de que el municipio contará ahora con 23,8 millones de euros.
El Gobierno municipal presentó estos presupuestos hace un mes, vinculados a una moción de confianza que perdió, pero consiguió sacarlos adelante después de que el PP (con cuatro concejales), Ciudadanos por Porriño (con tres ediles) e Independentes por Porriño (con dos concejales) no consiguieran formar un gobierno tripartito al no ponerse de acuerdo sobre quién ocuparía la alcaldía.
Al respecto, Francés reprobó que la oposición "no presentó ninguna alternativa ni ningún proyecto", sino que se limitó a "bloquear la acción del Gobierno al vetar los presupuestos". "Porque no tenían nada", razonó, al tiempo que vinculó al presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán, con esta coalición "de fuerzas de centro derecha" para desbancar al Ejecutivo nacionalista y aplaudió su "fracaso".
"Sólo trataba de colgar un nuevo trofeo para su partido, una alcaldía más", lamentó, y le recriminó que O Porriño "no es un trofeo". Además, invitó, en general, "a pensar más en el ayuntamiento y menos en las siglas" y confió en que "no se intenten malograr las inversiones municipales". Así, animó a "reflexionar" y aseguró seguir "dispuesto a dialogar" y a lograr el "consenso máximo".
FRACASO DEL CONSENSO
En declaraciones a Europa Press, el líder del PP local, Manuel Carrera, achacó a CxP la "imposibilidad" de fraguar el pacto. Así, criticó que "no quiso pactar", a pesar de que tanto su partido como IP "cedieran en sus pretensiones".
El debate en torno a quien ocuparía la alcaldía fue lo que imposibilitó el pacto, puesto que, a pesar de ser el PP la fuerza más votada y, por lo tanto, la que ocuparía ese cargo; CxP condicionó su apoyo al puesto. Además, en un primer momento aupó a la número tres del partido, María del Carmen López Palacín; y, tras lograr el acuerdo de PP e IP, reconsideraron a su presidente, Nelson Santos, para desempeñar esa función.
A este respecto, PP e IP "creen" que hay "pactos ocultos" entre CxP y la formación frentista, puesto que, según apuntó Carrera, "no es normal" que un partido independiente "no ceda ni un milímetro para entrar en el Gobierno". "No quiere entrar", concluyó, y consideró que hasta el momento "sólo hubo trámites" para "disimular el preacuerdo con Francés", quien "estaba seguro de que no habría pactos cuando presentó la moción de confianza", recordó el 'popular'.
Gonzalo Ordóñez, de IP, coincidió con Carrera y también apuntó que Francés "sabía que tenía todo bien atado y que no iba a pasar nada" cuando presentó la moción; y consideró "grave" el hecho de que CxP cambiara su candidato después de que ambos partidos aceptaran que el alcalde tendría sus siglas a pesar de que lo "legítimo" sería que tuviera las del PP.
Asimismo, lamentó que, en esta maniobra, Santos "descalificara" a López Palacín para justificar el cambio. "Dijo que era débil y que no desempeñaría bien su trabajo" al frente de la corporación, criticó, al tiempo que alegó que "ni es cierto, ni es serio, ni es democrático". "Se ha burlado de todos", lamentó, y advirtió de que "tendrán que explicar sus razones".
Por su parte, Carrera apuntó a "cuestiones personales más que políticas" las que pudieron ser el eje de esos "pactos ocultos" que denunciaron 'independientes' y 'populares' y desvinculó a Louzán de las maniobras para sacar adelante la moción de censura. "Son tonterías de Francés sin sentido ninguno", zanjó.
En cuanto a CxP, Ordóñez consideró que queda "en un papel penoso" para trabajar en la oposición a un grupo "que eligió para que gobierne"; y aseguró que Santos declaró "que entre el PP y el BNG, prefiere al BNG", a pesar de presentarse públicamente y en campaña como "de centro derecha". "Nos sentimos engañados", resumió.
REINTENTO
Acerca de la posibilidad de que esta situación pueda repetirse en un futuro, el primer edil de O Porriño razonó que los tres grupos de la oposición "lo pensarán mucho antes de meterse en otro túnel sin salida" y dejarán "las luchas estériles por el poder". Por ello, apostó por "mirar hacia delante" por el "bienestar" de la ciudadanía.
Con él coincidió Carrera, al no prever que este intento de consensuar una censura al alcalde porriñés pueda volver a intentarse, "puesto que ya se intentó dos veces". Al menos, según indicó, mientras continúe Nelson Santos al frente de CxP "porque es quien no cede".
Tampoco Ordóñez piensa volver a intervenir en mociones de censura, "salvo un cataclismo". "Somos serios y lo que decimos lo cumplimos", aseguró, al tiempo que explicó que en esta situación "era importante" porque el BNG gobernaba en minoría "con despotismo y rechazo a los otros grupos" y "porque fue el alcalde quien envió el órdago".
