Continúa la investigación para localizar a un tercer ocupante del vehículo, que logró escapar
FERROL, 10 May. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de Instrucción número 1 de Ferrol, en funciones de guardia, ha decretado el ingreso en prisión de dos vecinos de Carballo (A Coruña), de 22 y 25 años, que fueron detenidos por agentes de la Policía Local de Ferrol el pasado martes tras protagonizar una persecución hasta Oleiros.
En concreto, los hechos tuvieron lugar en la madrugada del pasado día 8 de mayo, cuando los jóvenes iniciaron una huída que los llevaría desde la ciudad naval hasta Perillo, en Oleiros. Allí, el vehículo con el que trataban de escabullirse se empotró contra una farola y un tercer ocupante, que aún no ha sido detenido, consiguió escapar.
Fuentes consultadas por Europa Press han explicado que los vecinos de la capital bergantiñana han sido trasladados en la tarde de este jueves a la cárcel de Teixeiro, en Curtis (A Coruña) tras permanecer unas 48 horas arrestados en las dependencias de la comisaría de la Policía Nacional de Ferrol-Narón.
El pase a disposición judicial de los detenidos tuvo lugar sobre las 11,30 horas y su comparecencia ante el juez se ha prolongado durante casi dos horas.
PERSECUCIÓN
Los arrestados fueron sorprendidos por trabajadores de la empresa encargada del servicio de recogida de residuos sólidos en la calle de la Iglesia de Ferrol, en el barrio de A Magdalena, sobre las 4,30 horas de la madrugada del martes cuando traban de entrar a robar en un estanco.
Al ser descubiertos, emprendieron su huida en un Ford Sierra que previamente habían sustraído en la ciudad departamental. Tras abandonar este turismo y subirse al coche que previamente habían dejado estacionado en el barrio de Esteiro, los dos arrestados fueron localizados por la Policía Local.
Los jóvenes ignoraron las advertencias de los agentes para que se detuvieran e iniciaron una persecución a bordo de un Seat Ibiza en la que participaron dos patrullas de la Policía Local. Durante el recorrido, los jóvenes incluso se llevaron por delante una de las barreras del peaje de Guísamo, Bergondo (A Coruña) y consiguieron burlar hasta tres controles de la Guardia Civil.
