Touriño achaca la pérdida del bipartito a "un golpe de mano" del aparato del PSdeG, que prefería "debilitarle" a "ganar"

Emilio Pérez Touriño
EUROPA PRESS
Actualizado: jueves, 15 noviembre 2012 22:30

Desvela que tuvo "prácticamente tomada" la decisión de cesar a Fernando Blanco y describe el bipartito como "un matrimonio de conveniencia"


VIGO/SANTIAGO, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -

El exsecretario xeral del PSdeG y expresidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, achaca la pérdida del bipartito a "un golpe de mano" del aparato de su partido que, según sus propias palabras, prefería "debilitarle" antes que "ganar" los comicios gallegos.

Lo dice en sus memorias políticas que el lunes saldrán a la venta en las librerías bajo el título 'O futuro é posible. Retrato dun tempo de cambio', y a las que ha tenido acceso Europa Press.

En ellas, defiende que la dirección del partido prefería "debilitar a un secretario xeral que no controlaban, que tenía otro concepto del partido y de su organización", porque temían que lanzase "una operación de renovación que necesariamente pasaba por ellos", que "ganar o perder las elecciones" autonómicas.

Así, a su juicio, en la campaña previa a los comicios de 2009, la "desafección" del núcleo duro del aparato organizativo del PSdeG "repercutió muy negativamente". De hecho, señala que afectó no sólo en la "débil" movilización del partido sino también en la decisión de "dejar sin respuesta la campaña del PP de fuertes descalificaciones al candidato".

DIMISIÓN

Tras esas elecciones, en las que el PPdeG logró la mayoría absoluta y, por tanto, los socialistas perdieron la Presidencia de la Xunta, Touriño explica que decidió dimitir como secretario xeral por entender que "alguien debía asumir en primera persona la responsabilidad por la pérdida del gobierno".

En ese punto, desvela que a la llamada del entonces dirigente socialista José Blanco respondió que su decisión "no dependía en nada" de la opinión de Ferraz. "Lo que tenía que hacer o dejar de hacer en primer lugar debería saberlo la Ejecutiva gallega", asegura que sostuvo.

En todo caso, Touriño acaba reconociendo en su libro que siente hacia Blanco "un afecto especial" por "los años de colaboración", en los que ayudó en la "reconstrucción del PSdeG".

Y, sobre su entrada en el Parlamento autonómico, apunta que los líderes provinciales en Lugo y Ourense en aquel momento, Ricardo Varela y Pachi Vázquez, respectivamente, junto con la que era secretaria de Organización, Mar Barcón, le trasladaron que no querían que recogiese su acta por entender que su presencia en la Cámara "iba a perjudicar" al partido.

LA "AMBICIÓN" DE PACHI VÁZQUEZ

Touriño, que denuncia "una grave interferencia del aparato de Ferraz dando por hecho el adelanto de las elecciones" gallegas de 2009, se muestra especialmente crítico en sus memorias con la actitud del ahora secretario xeral del PSdeG, Pachi Vázquez, durante los días previos a la cita con las urnas.

Así, mantiene que vio "el rostro desleal e incapaz del aparato" en la campaña, que le sirvió para "confirmar" que se "había equivocado" al permitir que Ricardo Varela, Pachi Vázquez y Modesto Pose "siguiesen al frente del poder orgánico" en las provincias de Lugo, Ourense y Pontevedra, respectivamente, dejando la renovación para después de los comicios.

Sobre el congreso de 2008, de hecho, destaca que le valió para "tomar nota" de "hasta dónde era capaz de llegar" el "sectarismo y la ambición" de Vázquez, entonces coordinador del PSOE ourensano.

BIPARTITO Y TENSIONES

En la obra, a lo largo de unas 500 páginas, Emilio Pérez Touriño también repasa su etapa al frente del Gobierno bipartito junto al BNG y, entre otras cuestiones, reconoce que "el gobierno nació como un matrimonio de conveniencia, carente de una cultura previa de coalición".

En todo caso, destaca que todos lo abordaron "cargados a partes iguales de responsabilidad e ilusión y con la firme convicción de la viabilidad del camino emprendido", así como conscientes de que abrían una "etapa histórica".

Además, considera que las tensiones de la coalición se manifestaron "sobre todo, en un cierto grado de confrontación" entre Vicepresidencia de la Xunta y la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp) y "entre los socios de gobierno con motivo de la competencia electoral para las generales".

Y, mientras "crecían las tensiones en el seno del gobierno", según su relato de los hechos, "desde mediados de octubre 2008" el PP comenzó a lanzar "fuertes ofensivas de desprestigio" sobre él.

PRINCIPALES CONFLICTOS CON EL BNG

En cuanto a los principales puntos de conflicto resalta Touriño el plan acuícola y, en mayor medida, el plan eólico y el lanzamiento del periódico 'Xornal de Galicia'. Estas dos cuestiones "cristalizaron la mayoría de las disensiones e incluso la única fractura de calado de la coalición".

Concretamente, revela que en el tramo final del proceso del concurso eólico --último trimestre de 2008-- tuvo "prácticamente tomada por lo menos en dos ocasiones" la decisión de "cesar" al conselleiro de Industria, el nacionalista Fernando Blanco, a quien acusó de una "gran deslealtad" y de tener una "actuación inadmisible".

Argumenta su decisión de mantenerlo al frente de ese departamento autonómico en la importancia de no abrir "una crisis de gobierno" que conllevaría la celebración de "unas elecciones anticipadas forzadas por la crisis de gobierno".

SU "MAYOR EQUIVOCACIÓN", LA ELECCIÓN DEL GOBIERNO

Finalmente, subraya como una de sus "mayores equivocaciones" haber "cedido" en la elección de los conselleiros ante "la presión de los más importantes dirigentes del partido, con algunos alcaldes a la cabeza", para que el secretario de Organización del partido y algún coordinador provincial entrasen en el Ejecutivo autonómico.

"Terminé cediendo, incorporando a Manuel (Pachi) Vázquez como conselleiro de Medio Ambiente y a Ricardo Varela en la Consellería de Traballo. Desgraciadamente, el tiempo confirmaría lo equivocado de mi decisión, además de complicar la formación del resto del gobierno", recuerda el expresidente gallego.