SANTIAGO DE COMPOSTELA, 27 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, se estrenará mañana en la entrega de las Medallas Castelao, las primeras del bipartito, que este año se han reducido a tres para "recuperar su prestigio" y que han recaído en el médico Ángel Carracedo; la archivera y miembro de la Real Academia Galega Olga Gallego; y el presidente de la Fundación Castelao, Avelino Pousa Antelo.
La Xunta aprobó el pasado jueves el decreto de estos premios, con los que pretende distinguir a los gallegos autores de una obra que merezca el reconocimiento de la comunidad en cualquier ámbito de actividad y que se entregarán en un acto con una importante representación institucional, como la presidenta del Parlamento, Dolores Villarino; el vicepresidente de la Xunta, Anxo Quintana; o el delegado de Gobierno, Manuel Ameijeiras.
Con la distinción a Ángel Carracedo, el Gobierno ha querido reconocer su "valiosa contribución" al estudio de la genética, ámbito en el que es reconocido internacionalmente. Nacido en 1995 en Santa Comba, actualmente es catedrático de medicina lega en la Facultad de Medicina de Santiago, además de haber ostentado la dirección del Instituto de Medicina Lega de Santiago, del Servicio de Genética Forense y, desde 1999, de la Unidad de Medicina Molecular de la Fundación Ingo.
Por su parte, la medalla a Olga Gallego destaca su trabajo a favor de la cultura gallegoa y su contribución al sector documental. Licenciada en Filosofía y Letras, pertenece al cuerpo facultativo de archiveros, bibliotecarios y arqueólogos y a lo largo de su trayectoria desempeló diferentes cargos del archivo de la Delegación de Hacienda y de la Biblioteca Pública de Vigo.
Por último, el tercer galardonado, Pousa Antelo, nacido en A Baña (A Coruña) en 1914, tomó parte en la campaña del Estatuto de 1936 y el reconocimiento con la Medalla Castelao pretende reivindicar sus trabajo a favor del desarrollo de la agricultura en Galicia y la promoción de los valores galleguistas.
La Medalla Castelao fue creada en 1984 para conmemorar el retorno a Galicia de los restos del intelectual Alfonso Rodríguez Castelao el 28 de junio de aquel año y el decreto de creación de este galardón señala que la perfección, el simbolismo o la trascendencia de las obras y del trabajo de los premiados debe ser fruto de la entrega de una vida y el reflejo de un trabajo conscientemente realizado con entrega en la cultura, en la historia y en el ser de un pueblo.
