SANTIAGO DE COMPOSTELA, 22 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) ha rebajado en un año y medio la pena a uno de los cómplices de una organización criminal que introdujo 60 kilos de heroína, droga que fue localizada en agosto de 2017 en una nave de Caldas de Reis (Pontevedra).
De ello ha informado el alto tribunal gallego, que ha desestimado los recursos interpuestos por seis de los 12 condenados por este caso y ha confirmado, de este modo, la sentencia de la sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, que impuso a los sospechosos a penas de prisión de entre 9 años y medio y 4 años y medio de cárcel.
Con todo, el TSXG ha estimado parcialmente el recurso de apelación que interpuso uno de los procesados contra la sentencia de primera instancia. En concreto, ha revocado la resolución y ha rebajado la pena de cárcel en un año y medio.
Así, lo ha sentenciado como cómplice de un delito contra la salud pública en su modalidad de sustancias que causan grave daño a la salud, en cantidad de notoria importancia, a tres años de cárcel, en lugar de a cuatro y medio, y al pago de una multa de 2,8 millones. La pena de prisión impuesta es "la mínima atribuida al cómplice".
SENTENCIA EN NOVIEMBRE DE 2019
En concreto, en noviembre de 2019, la sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, dictó sentencia en la que condenó a penas de prisión que van desde los 9 años y medio a los 4 años y medio de cárcel a los 12 acusados de introducir unos 60 kilos de heroína en Galicia, que fue localizada en agosto de 2017 en una nave de Caldas de Reis.
Entre otras cosas, el tribunal provincial consideró probado que prepararon la introducción de un cargamento de heroína, que fue localizado en una nave de Caldas de Reis, previamente alquilada por uno de los acusados.
La droga fue transportada por otros dos acusados de origen búlgaro oculta en el habitáculo de un camión. Otros tres acusados de esta nacionalidad estuvieron presentes cuando se descargó la droga para traspasarla a una furgoneta, e hicieron labores de supervisión y vigilancia.
El tribunal considera que el cabecilla del grupo estuvo en los momentos previos a la descarga en la nave, para pagar la droga, a pesar de que este procesado no fue detenido hasta semanas después.
