SANTIAGO DE COMPOSTELA, 8 Jul. (EUROPA PRESS) -
La I Semana Gastronómica Gallega celebrada en Santiago de Compostela, entre el pasado domingo y hoy, la carpa instalada en la Alameda compostelana por los hosteleros de la ciudad y la comarca contó con una afluencia de aproximadamente 5.000 visitantes, a falta de un recuento total que arroje una cifra exacta, apuntó la organización.
La carpa fue uno de los elementos de la iniciativa promovida por la Asociación de Empresarios de Hostelería de Santiago y Comarca, en la que también tomaron parte un total de 15 hoteles y 16 restaurantes de la capital gallega que coincidiendo con esta semana promocional ofrecieron en sus instalaciones atractivos menús con platos inspirados en las fiestas gastronómicas.
Sobre las dos y media de esta tarde, alrededor de medio centenar de personas acudieron a la carpa instalada en la Alameda santiaguesa para degustar los productos típicos de Galicia, como ya hicieron otras personas horas antes y en los días precedentes. Esta tarde-noche será la última ocasión para poder disfrutar este año de mangares típicos de Galicia al amparo de esta iniciativa promocional.
Pulpo, filloas, aguardiente, vino, 'queimada', queso, son sólo unos cuantos ejemplos de los productos que se podían encontrar en la carpa de la I Semana Gastronómica Gallega, destinada a acoger muestras de los principales productos gallegos para degustación de turistas y compostelanos. Además, en el interior de la carpa de podían observar carteles promocionales de las principales fiestas gastronómicas de la comunidad: patata, capón, habas y otras.
"BUENA" EXPERIENCIA
Andrés Condide, gerente de la Asociación de Empresarios de Hostelería de Santiago de Compostela y Comarca, en declaraciones a Europa Press, comentó que esta I Semana Gastronómica Gallega "superó todas las previsiones, ya que se trataba de un proyecto piloto, y ya pensamos en celebrar la segunda el año que viene".
La gran afluencia de turistas extranjeros y nacionales a Santiago, hace de la ciudad un "escaparate para los productos autóctonos, y nos percatamos de que en este sentido, en Compostela había un gran vacío", indicó el gerente. "Considero que la experiencia ha sido buena, ya que incluso muchos extranjeros se han interesado por la preparación de la 'queimada' o las filloas", concluyó Andrés Coquendide.
