PONTEVEDRA, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -
La apertura de la variante de Marín (Pontevedra) eliminará del núcleo urbano de la localidad un tráfico de cerca de tres millones de vehículos al año, lo que aumentará la seguridad vial, ha destacado el conselleiro de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas, Agustín Hernández, en el acto de presentación.
El recorrido entre Pontevedra y Bueu se reduce "a menos de la mitad" y llevará 15 minutos hacerlo, ha explicado en el acto de puesta en servicio parcial, en el que han estado presentes los alcaldes de Pontevedra, Marín, Bueu y Cangas, que destacaron que a partir de este viernes se mejora "sustancialmente" la movilidad entre estos ayuntamientos. De esta forma, han agregado, se facilita el acceso a las playas de la zona, así como la conexión con la autopista.
La puesta en servicio parcial permite el uso para "la mayoría" de los movimientos de entrada y salida de la variante a través del nudo de Lourizán, que estará completamente finalizado en el mes de agosto.
Hernández ha subrayado la importancia estratégica de esta actuación, que permitirá que a las empresas, al puerto de Marín y a toda la comarca de O Morrazo estar mejor comunicados a través de una vía rápida, "con el avance en seguridad y tiempo que eso supone".
La entrada en funcionamiento de esta variante "tendrá un efecto positivo también en la reducción de vehículos por el Corredor de o Morrazo de alrededor de 1.000 vehículos diarios", ha avanzado Agustín Hernández, que señaló que en los próximos quince días presentará un plan viario para O Morrazo.
El conselleiro ha indicado que la variante de Marín tuvo un presupuesto de 37,7 millones de euros. Junto al alcalde de Pontevedra, el nacionalista Miguel Anxo Fernández Lores, ha lamentado que el Ministerio de Fomento desoyese su petición de alejar de la ría la macrorotonda inaugurada este viernes provisionalmente en su entronque con la PO-11, en la fachada marítima y al lado del complejo de Ence.
Consellería y Ayuntamiento propusieron al ministerio una modificación de esa conexión con el fin de "evitar levantar un muro al borde de la ría", pero la respuesta fue negativa, han recordado tanto Hernández como Lores.
"Intentamos siempre hacer un enlace diferente pero al final el ministerio no dio ninguna alternativa y lo asumimos aunque no nos gusta el diseño", ha expuesto el conselleiro. "Lo que tenemos claro es que Marín no podía seguir sufriendo este problema", ha zanajado.
A partir de agosto se rematarán completamente las obras de la rotonda "facilitando los enlaces que por ahora tienen alguna complicación", ha destacado el conselleiro.
