PONTEVEDRA, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
Vecinos del Casco Viejo de Pontevedra, miembros de la comunidad parroquial de Santa María la Mayor, recogieron más de un millar de firmas de ciudadanos preocupados ante la situación que registra el entorno de la Real Basílica.
Para demandar soluciones al respecto han dirigido un escrito, acompañado de las firmas, a diferentes organismos denunciando que los alrededores de la Basílica se utilizan como "almacén para el material de las obras de diferentes calles de Pontevedra", a lo que suman las "toneladas de basura que a partir de cada jueves genera el botellón".
Los vecinos apuntan en su queja que el material que se emplea en la reforma urbana de las calles alrededor de la Basílica "está adosado a las paredes del templo", que el vallado utilizado para proteger esos materiales "no ejerce la función adecuada por descuido de los últimos responsables de estos trabajos", y suman a esta problemática la movida juvenil del fin de semana.
Señalan que el botellón que los vecinos llevan años soportando "con impotencia y desesperación", no hace sino "magnificar la degradación generada por todas estas circunstancias" . Los vecinos, que reclaman actuaciones frente a esta situación que afecta a un monumento considerado como BIC (Bien de Interés Cultural), recuerdan que la Basílica de Santa Maria La Mayor acaba de ser restaurada interior y exteriormente y destacan que es el edificio más visitado de la ciudad de Pontevedra.
"Esta tesitura hace imposible el disfrute y merma la atracción natural, cultural y patrimonial de la Basílica y su entorno", señalan los vecinos que reclaman "a las personas responsables que tengan competencias en este ámbito".
Al respecto, el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, señaló que "no tiene constancia de estas quejas", que espera conocer personalmente en una entrevista que mantendrá en los próximos días con los vecinos de esta parroquia. No obstante, avanzó que todo lo que afecta a la Basílica constituye una "prioridad" para el gobierno local.
