VILAGARCÍA DE AROUSA (PONTEVEDRA), 19 Jun. (EUROPA PRESS) -
Vilagarcía volverá a contar a partir del sábado 28 de junio con el mercado ambulante con todas las garantías de seguridad necesariasante la Covid-19.
Así lo ha ratificado el gobierno local después de que la asociación de comerciantes de la Plaza de Abastos anunciase en un primer momento la reapertura del mercadillo para este sabado y rectificase horas después posponiendola "por decisión del ayuntamiento".
La casa consistorial ha trasladado su deseo de que este tradicional mercado de martes y sábados vuelva "lo antes posible a la normalidad, pero nunca antes de que todos y cada uno de los aspectos que inciden en la seguridad de las personas estén perfectamente concretados y planificados".
Por eso, desde el grupo de gobierno vilagarciano se lamenta "la precipitación de la asociación de placeros" al anunciar una fecha sin contar con la confirmación del Ayuntamiento, que es la administración responsable y competente para organizar y autorizar la actividad.
El ejecutivo recuerda que en plena pandemia, una actividad como el mercado de Vilagarcía, que atrae la multitud de personas, "no puede celebrarse sin una planificación muy concreta y detallada que permita garantizar la seguridad de clientes y comerciantes".
UNO DE LOS MAYORES DE LA PROVINCIA
En este sentido, se incide en que la reapertura del mercadillo de Vilagarcía, uno de los mayores de la provincia de Pontevedra con 230 puestos autorizados, requiere de un estudio pormenorizado en el que se tengan en cuenta aspectos como el número de puestos, la dimensión de cada uno de ellos, las distancias de seguridad entre puestos y las del paso de la clientela.
Todos estos factores, añaden desde el gobierno local, harán necesario contar con más espacios para reemplazar los puestos de venta y analizar los efectos en la circulación rodada y en los estacionamientos.
"Se trata de una labor compleja y minuciosa en la que trabajan desde hace semanas las concejales de Mercados y Movilidad, junto con el responsable del Mercado, la Policía Local y los propios ambulantes", explican.
La reorganización, en la que primará el respeto a las normas de seguridad contra la Covid-19, se hará "atendiendo a criterios como la menor afección posible en el tráfico y la mayor comodidad para clientes y comerciantes".
Además, se aprovechará la ocasión para reorganizar la actividad de los vendedores ambulantes por sectores, tratando de reunir en una misma zona a los de la misma actividad.
