SANTIAGO DE COMPOSTELA, 12 Oct. (EUROPA PRESS) -
La presidenta del Parlamento gallego, Dolores Villarino, aseguró hoy que en el Pazo do Hórreo "toca apretarse el cinturón", por lo que anunció una reducción del seis por ciento en sus presupuestos, así como la congelación de los sueldos de los diputados y los altos cargos. "En tres años de legislatura ahorramos lo mismo que en 16 del PPdeG", comparó.
En esta tónica de "pelear el euro" mediante una "gestión económica muy rigurosa", Villarino negó las acusaciones de los 'populares' sobre un incremento "injustificado" en gastos de personal. Así, en una entrevista concedida a la Cadena SER recogida por Europa Press, aseveró que "se gastó lo mismo que en la legislatura anterior, pero con mucha más actividad". "Nosotros hicimos 32 actos frente a dos del PP", contrapuso.
En cuanto a sus proyectos al frente de la Cámara gallega, Villarino aseguró que "todavía" tiene "muchos planes" y que está "dispuesta" a repetir en el cargo la próxima legislatura. Por ello, se puso "a disposición del partido y del presidente" de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, "en cualquier dirección", y aseveró no haber dicho "nunca que no a nada" de lo que éste le solicitó.
Una de sus "prioridades" durante su mandato fue "la protección del medio ambiente" con el objetivo de "luchar contra el cambio climático", por lo que apostó por el uso de los ordenadores frente al papel para "proteger unos 5.500 árboles". A raíz de la polémica que suscitó una foto de una diputada consultando una página web de zapatos, minimizó la cuestión y defendió que "por esos árboles vale la pena que alguno mire una página de zapatos o de cualquier otra cosa". "Otras cosas no se puede, que hay un filtro", ironizó.
Por otra parte, aludió al debate sobre el estado de la autonomía y valoró la intervención del presidente como "formalmente impecable". "Hizo un balance somero de la situación en la que estamos y sobre las medidas que tendremos que adoptar", explicó, y aunque admitió que "habrá gente a la que no le guste", la presidenta de la Cámara insistió en que fue "absolutamente ajustado" a "un debate sobre política general".
