PONTEVEDRA, 14 Sep. (EUROPA PRESS) -
La conselleira de Pesca, Carmen Gallego, considera que la actual Xunta está dispensando a las mariscadoras un trato y atención como "nunca hasta ahora" recibieron por parte de la Administración autonómica.
"Deberían estar satisfechas", dijo la conselleira tras recordar el trato que la Xunta bipartita dio a las mariscadoras tanto durante las riadas de octubre del año pasado, como ahora que con la catalogación del banco marisquero de Placeres como zona C, se les garantizó mediante ayudas y convenios que durante el tiempo en el que no puedan relizar su actividad extractiva, perciban un salario.
"El comportamiento de este Gobierno es único, es la primera vez que sucede, y eso debería ser reconocido por las mariscadoras de la ría de Pontevedra", insistió Carmen Gallego en respuesta a algunas críticas surgidas en el sector por la lentitud de la administración en solventar los problemas de contaminación en la ría de Pontevedra.
En este sentido, la titular de Pesca en el Ejecutivo autonómico recordó que Medio Ambiente está realizando una serie de obras de saneamiento en la ría de Pontevedra, para tratar de solucionar la alta presencia de coliformes en el banco marisquero de Placeres, y señaló que espera que esta situación se solucione cuando entre en funcionamiento el sistema de depuración terciaria en la zona.
"Cuando funcione esta depuración se continuarán haciendo analíticas para ver la evolución la bacteria y comprobar si cumplen los parámetros establecidos por la legislación, en cuyo caso se podría volver a recatalogar el banco marisquero y permitir la recuperación de la actividad extractiva normal", manifestó la conselleira que en cambio evitó hablar de fechas y plazos.
"Nunca hablo de fechas porque sería absurdo", indicó Carmen Gallego quien reiteró que "tenemos que esperar a que se terminen las obras, a que se hagan las analíticas y se den los parámetros exigibles, y si se cumplen as condiciones se les permitirá volver a faenar".
En este mismo sentido, la conselleira dejó bien claro que la primera preocupación del gobierno autonómico es que los productos que se extraen de las rías "salgan con las debidas condiciones sanitarias, por lo tanto, lo primero que tenemos que garantizar es la salubridad pública".
