Administraciones locales deben primar en la cogestión de Son Sant Joan e incluir al sector privado, según un experto

Actualizado: jueves, 24 enero 2008 19:08

Una descentralización permitiría bajar las tarifas de los vuelos en Palma

PALMA DE MALLORCA, 24 Ene. (EUROPA PRESS) -

El experto en política económica e ideólogo del modelo de gestión aeroportuaria propuesto para Catalunya, Germà Bel, participó hoy en la jornada sobre descentralización del sistema de aeropuertos organizada por la Cámara de Comercio de Mallorca, donde apostó por un modelo de gestión autónoma para cada aeropuerto, en el que la mayor capacidad de decisión sea de las administraciones locales, tanto municipales como supramunicipales.

Así lo manifestó en rueda de prensa previa, donde explicó que la conveniencia de que las decisiones sean tomadas por instituciones locales --"no necesariamente regionales"-- se justifica por la mayor capacidad de innovación y transformación que tienen, en comparación con el Gobierno central. "Se trata de un sector muy líquido, con cambios permanentes", afirmó.

Por ello, aunque consideró que es "inevitable" que en España el Ejecutivo central siga participando de la gestión de los aeródromos, insistió en que las administraciones locales deben tener "preeminencia", ya que, de otro modo, se mantendría el actual modelo de gestión integrada, centralizada.

La propuesta de Bel consiste en un modelo de gestión autónomo para cada uno de los aeropuertos, o al menos para cada ciudad, de modo que puedan competir entre sí, diseñar sus propias políticas comerciales y ajustarlas a las especificidades de cada instalación. "No tienen las mismas necesidades de gestión los aeropuertos que operan millones de pasajeros al año que los que tiene 100.000", añadió.

Una vez descentralizada la gestión aeroportuaria, Bel propone que sea cada uno de los aeródromos y sus instituciones locales las que decidan qué fórmula de participación en la gestión es más conveniente, con una mayor o menor presencia del sector privado en función de sus características, sin necesidad de que esa fórmula se generalice al resto del Estado.

"España es un caso excepcional. La mayoría de los países tienen modelos distintos para sus aeropuertos, con gestión sólo pública, sólo privada, mixta o incluso llevada por organizaciones como las cámaras de comercio", detalló. En opinión de este experto, lo más adecuado para Palma, y para los aeródromos con un volumen importante de tráfico aéreo, sería integrar la participación pública y privada.

En cuanto a la propiedad de los terrenos o las instalaciones aeroportuarias, Bel considera que es una cuestión casi "irrelevante", puesto que, observando los ejemplos de otros Estados, aun en los casos en que la titularidad sigue siendo pública, las concesiones de explotación se firman por periodos muy largos de tiempo y la propiedad se convierte en un tema tangencial.

Acerca de las consecuencias que esta reforma podría tener en España, el catedrático explicó que permitiría una mayor transparencia financiera de los aeropuertos --"AENA niega que existan estas cifras y no es cierto"-- y también una mayor agilidad y eficiencia de cada aeropuerto. "Actualmente hay 20 que son rentables, con esta reforma podrían ser 28 ó 30", calculó.

BAJARÍAN LAS TASAS EN SON SANT JOAN

En el caso de Baleares, aseguró que el aeropuerto de Son Sant Joan, por ejemplo, "podría estar cobrando menos tasas si cambiara su modelo". "Las tarifas bajarían en algunos casos, como en Palma, y subirían en los que generan más costes de las tasas que actualmente están cobrando, como Barcelona o Madrid", aclaró.

Para Bel, los argumentos que se dan para huir de una descentralización es el afán del poder público central de mantener cierto "poder" en la decisión de qué aeropuertos beneficiar en lugar de otros. "Los gobernantes ya no podrían primar unas ciudades sobre otras. La ventaja en España de cara a una reforma es que dispone de buenos profesionales tanto en el sector público como en el privado", opinó.

Según dijo, la reticencia a dejar el modelo centralizado "arcaico y retrasado" no se debe a los argumentos que habitualmente se plantean; la necesidad de mantener una "red" unitaria y la "solidaridad" de los más rentables con aquellos que no lo son. "Lo que se dice, no es real", advirtió Bel.

Para argumentar esta idea, indicó, apoyándose en gráficos y estadísticas, que los aeropuertos que más inversiones reciben del Estado no son los que registran menores cuotas de tráfico aéreo y que los más perjudicados en este reparto son los de Canarias, Baleares, Andalucía y Comunidad Valenciana, mientras que Madrid recibe más de la mitad de los recursos totales (al margen de T4 e inversiones extraordinarias).

Por su parte, el presidente de la Cámara de Comercio de Mallorca, Joan Gual, declaró que el objetivo de estas jornadas, donde participaron más de 60 representantes de entidades civiles y empresariales, es profundizar en el conocimiento de las posibilidades existentes de cara a la cogestión para adoptar una posición común que, además, sirva al Govern para reclamar un modelo concreto ante el Ejecutivo central.