Baleares, por debajo de la media española en el uso de bombas de insulina en personas con diabetes

Diabetes
UEX
Actualizado: domingo, 5 julio 2015 14:54

LOGROÑO, 7 Sep. (EUROPA PRESS) -

Baleares se encuentra a la cola de las Comunidades Autónomas en el uso de las bombas de insulina como tratamiento para las personas con diabetes, según refleja el estudio FENIN 2012 que pone de relieve las diferencias entre las distintas regiones.

De esta forma, Baleares ocupa las últimas posiciones en el ranking nacional, que junto a País Vasco, cierra la clasificación, no superando el 2 por ciento de penetración en este tipo de tratamiento.

El presidente de la Asociación de Diabéticos Asociados Riojanos (DAR), Alberto Avenoza Mañas, señala que "estas cifras deben hacernos reflexionar y tomar conciencia de la importancia del uso de las bombas de insulina en pacientes con diabetes, fundamentalmente tipo 1, porque los datos de nuestra comunidad nos señalan como una de las regiones españolas donde menos se utiliza este tratamiento".

Sin embargo, "los últimos datos apuntan a que cada vez más los profesionales sanitarios están más sensibilizados con este tipo de terapia debido a sus ventajas: mejora del control de la glucosa, reduce las hipoglucemias, genera menor variabilidad glucémica y, en definitiva, aporta un considerable aumento de la calidad de vida de los niños con esta patología".

Los beneficios de la terapia con bomba de insulina en pacientes en edad pediátrica son claros: mejora el control de la diabetes tipo 1 y reduce hasta en 4 veces el riesgo de sufrir hipoglucemias, un problema serio, sobre todo por las noches.

Además, el uso de la bomba de insulina consigue reducir los eventos hipoglucémicos hasta un 53% al año en niños con diabetes tipo 1. La hipoglucemia es bastante frecuente entre las personas con diabetes: un tercio de los mismos sufren estos capítulos mientras duermen, y es uno de los aspectos más temidos a lo largo de su vida ya que puede causar pérdida de conciencia, convulsiones, coma, etc.

Asimismo, el uso de la bomba de insulina en pacientes pediátricos supone una reducción significativa del número de pinchazos; con este tratamiento sólo hay que cambiar el equipo de infusión cada dos o tres días, pasando así de una media de 5 inyecciones diarias a una cada tres días. Es decir, se pasa de 150 mensuales a 10.

Un mejor control posibilita que los niños tengan más autonomía para gestionar su diabetes y a la hora de realizar actividades cotidianas como comer, dormir tranquilamente, hacer deporte, realizar viajes o excursiones. Los padres de los niños con diabetes tipo 1 tienen menos miedo a que sus hijos sufran un episodio de hipoglucemia por las noches o cuando están fuera de casa.