PALMA DE MALLORCA, 11 Nov. (EUROPA PRESS) -
Baleares registra una tasa de pobreza y exclusión social del 27,8 por ciento, una cifra que sitúa a los ciudadanos de las islas, por encima de la media estatal, según el VII Informe Foessa 2014, que constata el "incremento notable" de la desigualdad en la comunidad, una evolución "muy superior" a la de España.
Según el estudio, la desigualdad ha aumentado en Baleares un 22 por ciento entre los años 2008 y 2012, frente al 8,6 por ciento de España. Además, únicamente el 30 por ciento de la población no se encuentra afectada por ningún indicador de exclusión social en las islas.
En Baleares se estima que hay 115 hogares, esto es 306.000 personas, que se encuentran en exclusión social. Ésta se encuentra distribuida de manera equivalente entre la exclusión moderada y la severa y tiene una incidencia superior a la de España.
El informe considera primordial ofrecer una atención de urgencia a los 41.000 hogares -130.000 personas- que están en una situación de exclusión social severa.
Además, los problemas relacionados con el consumo afectan en mayor medida a los hogares de Baleares que a los de España, principalmente por una mayor prevalencia de la pobreza extrema (ingresos inferiores al 30 por ciento de la renta familiar mediana equivalente).
Por otro lado, los relacionados con el aislamiento social afecta también en mayor medida a los hogares de Baleares por un mayor número de familias que no tienen ningún apoyo para situaciones de enfermedad o de dificultad. En este sentido, hay 2,3 por ciento de individuos en esta situación en la comunidad, frente al 1,2 por ciento de España.
En cuanto al desempleo, éste afecta "en muchos casos a todas las personas activas del hogar". Además, la duración del paro aumenta entre los sustentadores principales del hogar y este desempleo no se acompaña de alternativas formativas que mejoren la empleabilidad.
TRES DE CADA DIEZ PERSONAS, ALEJADA DEL ESPACIO DE PARTICIPACIÓN
Según el informe, tres de cada diez personas de las islas está alejada del espacio de participación política y social. Ésta afecta principalmente a personas que no pertenecen a la Unión Europea, desempleados o de entre 30 y 44 años.
Así, la falta de motivación por la participación en la toma de decisiones colectivas es en Baleares de un 22 por ciento, frente al 8 por ciento de España.
El miembro del Servicio de Estudios de Cáritas, Guillermo Fernández, ha explicado que los problemas de exclusión que más afectan a la sociedad balear son los relacionados con el trabajo, la participación política y la vivienda. En este sentido, el informe detalla que el 41 por ciento de la población sufre exclusión del trabajo y una de cada cuatro personas está afectada por factores de exclusión residencial.
Finalmente, el estudio apunta que la mitad de los hogares de las islas cuenta con ayuda de su red próxima en momentos de necesidad.
