Crece ligeramente el pesimismo en el empresariado turístico de cara a la temporada alta, según Gadeso

Actualizado: viernes, 1 junio 2007 20:53

Las previsiones son buenas en general pero aumenta el colectivo que vaticina un retroceso

PALMA DE MALLORCA, 1 Jun. (EUROPA PRESS) -

Los empresarios del sector turístico de Baleares se muestran ligeramente más pesimistas con respecto a las previsiones de la temporada alta recién inaugurada de lo que se era el año pasado, especialmente en el sector de la oferta complementaria, según la última encuesta realizada por la publicación Quaderns Gadeso.

El informe pretende tomar el pulso al empresariado para analizar el nivel de confianza de cara al verano. Según revela, aunque las expectativas empresariales para la próxima temporada son positivas, hay una ligera bajada en relación a 2006, también en el sector alojativo, con algunas diferencias entre los hoteleros y el alojamiento residencial.

Además, la percepción negativa, confirma el análisis, continúa instalada en la oferta complementaria, que se ve perjudicada por la proliferación del producto turístico del 'todo incluido' y también por por la presencia cada vez más relevante del turismo residencial.

Por islas, el 80 por ciento del empresariado mallorquín considera que la temporada será igual a la de 2006 --que en su conjunto fue valorada como positiva--. Sin embargo, mientras que el pasado año tan sólo el 5 por ciento consideraba que los resultados previstos serían peores a los del año anterior, actualmente lo piensa un 10,5 por ciento, concentrándose el pesimismo en la oferta complementaria (15%) y en determinadas zonas obsoletas.

En Menorca hay menos diferencia entre la percepción del sector alojativo y el de oferta complementaria, aunque es en este último en el que se concentra mayormente la percepción negativa. Así, se espera un ligero ascenso en los beneficios empresariales del sector hotelero, de un índice del 2,8 al 3, pero crece hasta el 15 por ciento el número de empresarios que auguran una temporada 2007 peor que la de 2006.

Además, atendiendo a las previsiones de rentabilidad, las ventas no parece que vayan a mejorar y los precios, se teme, no podrán mantenerse. Si se cumple este vaticinio, los beneficios de explotación serían prácticamente inexistentes, lo que transformaría los resultados empresariales en negativos.

Las perspectivas también disminuyen en las Pitiusas, si bien en Formentera este reflejo es más acusado. Aunque se espera un mantenimiento en el número de llegadas, se augura una bajada de la rentabilidad empresarial. El 8 por ciento del alojativo ibicenco piensa que le irá peor que el año pasado. Asimismo, bajan en dos décimas los beneficios de explotación previstos.

Por último, en Formentera, se percibe cierta preocupación del sector a causa de la masificación de turistas en la isla en determinadas fechas y de la presencia de una oferta complementaria que está creciendo, según Gadeso, de manera exponencial sin por ello mejorar sus productos.