PALMA DE MALLORCA, 22 Dic. (EUROPA PRESS) -
Esquerra Unida ha denunciado este sábado la "irresponsabilidad e ineptitud" del Govern, que "derrocha" 50 millones de euros por su política ferroviaria al no continuar "un proyecto muy beneficioso" para la comunidad como es la línea Manacor-Artà.
El partido, en un comunicado, ha criticado que la renuncia a esta línea y a reclamar financiación estatal deje sin uso las nuevas unidades de trenes. Según ha manifestado, la "opción ideológica del PP a favor del vehículo privado y las autopistas llega a límites grotescos".
En este sentido, critican que el Govern no vaya a reclamar la financiación estatal de la electrificación pendiente entre las estaciones de Inca y Manacor y haya renunciado al ramal de la comarca de Llevant, que une Manacor en Artà, con las obras ya comenzadas.
"Provocan que las nuevas unidades de trenes que están llegando sean alojadas en un almacén dónde se deteriorando sin que se les dé ningún uso". En este sentido, EU ha criticado que en una época de restricciones económicas como la actual estén "dispuestos a derrochar 50 millones de euros antes de continuar con un proyecto muy beneficioso, pero que tenía el 'defecto' de que estaba aprobado por un Govern progresista".
En este sentido, ha reprochado que la "apuesta" de los 'populares' continúen siendo las carreteras y, en este sentido, han reclamado del Estado la aportación de unas cantidades que se tendrían que aportar en base a un convenio que el expresidente Jaume Matas "incumplió de manera flagrante". "No obstante, la vaporosa enmienda aprobada en el Senado no garantiza que llegue ni un solo euro, pero define sus prioridades".
EU, que ha recordado que lleva años reivindicando el tren de Llevant, ha hecho hincapié en el apoyo ciudadano masivo que tiene este medio de transporte público. Por ello, ha reclamado que se lleve a cabo el proyecto ferroviario aprobado durante la pasada legislatura y que se exija la aportación del Gobierno que estaba pactada.
Al mismo tiempo, ha denunciado la "ineptitud de un Govern que no sabe qué hacer con los trenes que le están llegando y que los deja abandonados. Es una ineptitud como la que permite seguir pagando para la construcción de un Palacio de Congresos de Palma, cuando las obras están completamente paradas y no hay ningún proyecto de futuro que permita prever su finalización y la entrada en funcionamiento".
