El Govern prevé recortar el gasto público en 120 millones de euros más para reducir el déficit

Actualizado: sábado, 29 mayo 2010 17:53

El Ejecutivo contempla un posible incremento del impuesto de transmisiones patrimoniales y la modificación del tramo autonómico del IRPF

PALMA DE MALLORCA, 29 May. (EUROPA PRESS) -

El Govern balear prevé reducir en unos 120 millones de euros el gasto público -unos cien millones mediante la reorganización y racionalización del sector y unos veinte o treinta a través de la supresión de las inversiones no comprometidas- como una de las principales medidas dirigidas a disminuir el déficit de las islas, lo que se sumaría al recorte de 220 millones que ya se efectuó dentro de los presupuestos autonómicos de 2010.

Se trata de una de las cuestiones dadas a conocer en las reuniones mantenidas a lo largo de una intensa mañana en el Consolat de Mar entre el presidente del Govern, Francesc Antich, los consellers de su gabinete, CAEB, PIMEM y los sindicatos UGT y CCOO, a quienes transmitió que el Ejecutivo está estudiando además la posibilidad de gravar al alza el Impuesto de Sucesiones e incrementar también el de Transmisiones Patrimoniales para las rentas más altas, lo que se en cualquier caso se produciría a partir de 2011.

Fue el presidente de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Baleares (CAEB), Josep Oliver, quien detalló en primer lugar las medidas tratadas en su encuentro con Antich y los consellers de Economía, Carles Manera, y Presidencia, Albert Moragues. Durante el acto le comunicaron asimismo que se contemplan modificaciones en el tramo autonómico del IRPF, la supresión de las inversiones no comprometidas, mientras que se mantendrán las inversiones productivas y las previstas para 2010.

De este modo, el Ejecutivo crearía una serie de franjas para el Impuesto de Sucesiones con el fin de hacerlo progresivo y gravar más a quienes tengan una mayor base liquidable, teniendo en cuenta que, actualmente, sólo grava el 1 por ciento para todas las rentas. Además, podría pedir al Gobierno central que recupere el Impuesto de Patrimonio.

"Hay que procurar la máxima racionalización y control del gasto público y para ello se contemplarían eliminaciones o fusiones", manifestó por su parte la portavoz del Govern, Joana Barceló, a su salida del Consolat, en referencia a una posible reducción de empresas u organismos públicos. Sin entrar en el fondo de este asunto, Barceló apeló a la necesidad de construir una administración "más eficiente y ajustada, no a corto plazo sino como estrategia y oportunidad".

A partir de este momento, aseveró, el objetivo del Govern es presentar estas medidas a los partidos políticos a fin de alcanzar un consenso al respecto ya que "se trata de una cuestión de estructurar la Comunidad Autónoma y para ello hay que encontrar puntos de acuerdo". Sin embargo, declinó aportar cifras concretas "por coherencia".

Por su parte, el presidente de PIMEM, Joan Cabrera, manifestó que el recorte del gasto público que le transmitió el jefe del Ejecutivo balear durante la reunión gira en torno a los cien millones de euros -al no incluir la supresión de las inversiones no comprometidas-. Durante el encuentro, Cabrera expresó su preocupación ante el "sobredimensionamiento" de la Administración y el mantenimiento de dos medios de comunicación públicos.

Asimismo, tal y como después comentó a los numerosos medios de comunicación que aguardaban a las puertas del Consolat, puso de manifiesto la importancia de crear puestos de trabajo en las pequeñas y medianas empresas ya que, de lo contrario, "difícilmente la Comunidad saldrá adelante".

Finalmente fue el turno de la secretaria general de CCOO y del secretario de Acción Sindical de UGT, Katiana Vicens y Manuel Pelarda, respectivamente. A la finalización del encuentro, Vicens expresó su "absoluto desacuerdo" con las medidas aprobadas por el Gobierno central para reducir el déficit y mostró su "satisfacción" por que el Ejecutivo autonómico "se haya atrevido a contemplar reformas impositivas a las rentas más altas".

En relación al sector público de las islas, subrayó que requiere de "una racionalización y acabar con las duplicidades, además de ir más allá de la profesionalización de sus trabajadores". En cuanto a cifras, señaló que se le ha transmitido el mantenimiento de los 500 millones de euros procedentes de los Presupuestos de 2010 y 200 correspondientes a las inversiones estatutarias, mientras que unos 300 millones de inversiones del Estado "quedan en el aire".

Mientras tanto, Pelarda mostró también su rechazo al Decreto del Gobierno para reducir el déficit, al tiempo que abogó por "acabar con el clientelismo político y reducir las empresas públicas". El responsable de UGT consideró, no obstante, que los acuerdos "deberían haber llegado antes de la aprobación del Decreto".

"No se puede apostar por una reducción del déficit en contra del incremento económico", lamentó Pelarda, para quien las medidas fiscales planteadas "son un parche y lo que se necesitan son políticas como las aplicadas en otros países europeos", con el equilibrio de ingresos y gastos. "En España no se habla de una reforma fiscal en base a suficiencia, progresividad y equidad, y estamos cansados de que el sistema fiscal se sustente sobre 'parcheos", concluyó Pelarda.

REUNIÓN CON BAUZÁ Y MELIÀ

Está previsto que el líder del gabinete autonómico se reúna, mientras tanto, el próximo lunes con el presidente del PP balear, José Ramón Bauzá, y su homólogo en Unió Mallorquina (UM), Josep Melià, a fin de tratar estas iniciativas contra el déficit.

En concreto, Antich recibirá en el Consolat de Mar a Melià a las 9.30 horas mientras que la reunión con Bauzá está prevista a las 11:00h. El presidente del Govern les expondrá las actuaciones que se prevén llevar a cabo con la voluntad de llegar "a los máximos acuerdos posibles con todas las fuerzas", según pusieron de manifiesto desde Presidencia en un comunicado.