Juzgan a un joven por matar a puñaladas a la pareja de su madre e intentar matarla a ella en Costa d'en Blanes

Sede del TSJIB y de la Audiencia Provincial de Baleares.
Sede del TSJIB y de la Audiencia Provincial de Baleares. - EUROPA PRESS - Archivo
Publicado: sábado, 21 septiembre 2019 11:18

La Fiscalía solicita para el acusado una pena de 36 años de cárcel por estos hechos que ocurrieron en enero de 2018

PALMA DE MALLORCA, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -

El Tribunal del Jurado de la Audiencia Provincial de Baleares juzga a partir de este lunes a B.K., un joven acusado de matar a puñaladas a la pareja de su madre e intentar matarla a ella en Costa d'en Blanes (Calvi, Mallorca) en enero de 2018.

La Fiscalía solicita para el acusado, que en el momento de los hechos tenía 27 años, una pena de 36 años de cárcel.

Según el escrito acusatorio, sobre las 21.00 horas del 11 de enero del año pasado, con motivo de una discusión con su madre y su pareja por su forma de vida, el acusado cogió una bayoneta de su cuarto y les asestó tres puñaladas a cada uno.

En concreto, la madre del procesado le pedía que buscara trabajo y él, por su parte, se sentía acosado psicológicamente por su madre y su compañero sentimental, "al entender que no le tenían afecto y que le marginaban", explica el Ministerio Fiscal.

Tras la primera agresión, el acusado, de nacionalidad ucraniana, comprobó que las víctimas todavía respiraban y fue a la cocina de donde cogió un cuchillo de cocina. Con él le asestó 21 puñaladas más al hombre. "¿No me decías rusito?, pues toma rusito", le decía mientras tanto. A su madre, posteriormente le asestó 18 puñaladas.

Como consecuencia de estos hechos, el hombre falleció por shock hipovolémico con parada cardiorrespiratoria. La madre del procesado sufrió heridas por todo el cuerpo que tardaron en curar 299 días.

Siguiendo con el escrito de acusación, tras los hechos el investigado llamó al SEIB 112 para comunicar simplemente que había dos cadáveres en el domicilio.

Desde el Ayuntamiento de Calvi, sin embargo, se explicó en su momento que el joven, que constaba con antecedentes penales, confesó los hechos. Ya había sido detenido en 2013 por un robo con violencia en Magaluf y en 2015 por agresiones en el ámbito familiar. A consecuencia de esta segunda detención, se le impuso una orden de alejamiento hacia sus progenitores.

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