IBIZA, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Policía de Playa del municipio de Sant Josep ha detectado la proliferación de zulos en las playas de la localidad, utilizados para esconder el material de la venta ambulante.
Según han explicado desde el Ayuntamiento, los vendedores esconden en los zulos el material durante la noche y se abastecen de ellos durante el día para evitar los controles policiales.
Asimismo, han destacado que en Cala Bassa este martes se localizó uno de estos escondites, donde se amontonaban kilos de fruta y hasta 350 latas de bebidas, además de neveras y bolsas de hielo.
Los agentes han alertado sobre la falta de condiciones higiénicas en las que se guardan este material, que no tiene ningún tipo de control sanitario y que supone un peligro para el consumidor que decide adquirirlos.
El concejal de Interior, Serafín Grivé, ha explicado que la incautación de material de este tipo "se realiza todos los días" y ha pedido la colaboración de los ciudadanos "que deben evitar adquirir estos productos, no sólo porque suponen una competencia desleal hacia los negocios legales de las playas, sino también por el peligro que entrañan para su salud".
Grivé ha informado que este domingo, también en Cala Bassa, el servicio de playas detuvo por resistencia y desobediencia a la autoridad a un vendedor ambulante, J.J.R.M. de nacionalidad española, que se enfrentó a los agentes que realizaban la vigilancia de playas.
