PALMA DE MALLORCA, 29 May. (EUROPA PRESS) -
La obra pública licitada en Baleares ha descendido un 82 por ciento en el primer trimestre de 2008 respecto al mismo periodo del año anterior, una caída en picado que se produce como consecuencia de la lentitud o parálisis administrativa provocada por la falta de financiación por parte del Gobierno central, que mantiene en el aire la firma de varios convenios de importante dotación económica.
Así, entre enero y marzo de 2007 se licitó en Baleares obra pública por valor de 288 millones de euros, de los que 74,7 procedían de la Administración central, 114 del Govern autonómico y 99 de ayuntamientos y Consells Insulares. Unas cantidades muy superiores a las cifras actuales, cuando se han licitado 52 millones de euros en obra pública: 17,5 del Gobierno, 15,3 del Govern y 19 de administraciones locales e insulares.
Son datos facilitados a Europa Press por la Asociación de Constructores de Baleares, que confirman la situación de desaceleración que atraviesa el sector. Según su director, Manuel Gómez, "tenemos la promesa de que Antich hará todo lo que pueda, pero si el dinero no llega de Madrid, es imposible".
En este sentido, señaló que la "maquinaria administrativa está costando de arrancar" -en referencia al nuevo Ejecutivo- si bien insistió en la "urgencia" de que se dé un "impulso cuantitativo" a la licitación para sanear el sector.
En Baleares hay unas cien empresas que viven de la obra pública y que emplean a unos 12.000 trabajadores. De ellas, las que tengan un cierto colchón de varios años de crecimiento "sobrevivirán", pero otras deberán recurrir a la reducción de la plantilla, o, en el peor de los casos, al cierre, lo que supondrá un "efecto multiplicador" en otras empresas distribuidoras.
"La construcción tiene una capacidad de arrastre enorme y hay muchas empresas relacionadas que están teniendo unas dificultades gravísimas para satisfacer sus deudas", subrayó.
UN 10% MENOS DE INVERSIÓN
Este sector generó en Baleares en 2007 una inversión bruta total de 2.863 millones de euros, un 5 por ciento menos que en el año anterior (3.016 millones de euros). A tenor de la "baja licitación" y de la desaceleración económica, esta caída, según Gómez, será al cierre de 2008 superior al 10 por ciento.
Por ello, consideró que las administraciones tienen que hacer un esfuerzo para disminuir el gasto público, mejorar la gestión de los recursos disponibles, no a costa de aumentar los impuestos, sino exigiendo al Ejecutivo central lo que adeuda. En este punto, hizo alusión a numerosos proyectos que siguen pendientes de licitación, como son la construcción de nuevos colegios, centros sanitarios o centros deportivos.
Gómez también se refirió a la construcción del segundo cinturón de Palma, que por la "falta de acuerdo" entre los partidos del Consell el proyecto no va hacia adelante. Asimismo, destacó que es muy importante que el Ministerio de Fomento inyecte a las islas toda la financiación prevista para que las administraciones puedan "ponerse a trabajar". De lo contrario, las tasas de desempleo seguirán aumentando (el pasado mes de abril cotizaban en el régimen general de la construcción un 6,5% menos de trabajadores que en 2007).
