PALMA DE MALLORCA, 27 Dic. (EUROPA PRESS) -
Las Oficina de Ayuda a las Víctimas del Delito de Baleares (OAVD) atendió un total de 2.188 consultas hasta finales del mes de noviembre, de las que 868 fueron relativas a casos de violencia doméstica, mientras que otras 239 se debieron a delitos contra la libertad sexual, lo que supondrá, previsiblemente, un ligero repunte respecto al año pasado.
Según informaron a Europa Press fuentes de la Conselleria de Innovación, Interior y Justicia, en el total de 2008 se produjeron 2.277 consultas, de las que 826 correspondieron a violencia doméstica, unas cifras que serán parecidas al acabar el presente ejercicio, en el que durante los once primeros meses la oficina realizó 2.307 actuaciones, frente a las 2.402 desarrolladas en todo el año pasado.
Todas estas demandas de información fueron canalizadas a través de la red de la OAVD, que cuenta con un total de diez oficinas, repartidas entre los Juzgados de Avenida Alemania de Palma, las dependencias de la Policía Local de la calle Sant Ferran, en el caso de la capital balear; mientras que el resto se encuentran en Calvià, Inca, Manacor, Platja de Muro, Maó, Ciutadella, Eivissa y Formentera.
Entre las novedades registradas a lo largo de este año, destaca la dotación del servicio de atención psicológica a las sedes de Inca y Manacor, así como la prolongación del periodo de prestación de orientación en la de Formentera, que antes abría sólo en verano y a partir de ahora lo hará durante los doce meses. Además, también se ha incrementado el horario de los psicólogos que atienden los juzgados de Palma.
La OAVD recibirá en 2010 el mismo presupuesto que durante este año, 459.000 euros que aporta íntegramente la conselleria, y que se destinan a ofrecer a las víctimas de hechos delictivos una atención integral, inmediata y especializada en diversos aspectos, desde jurídicos a sociales, pasando por los psicológicos. Para ello, el servicio cuenta con personal especializado que atiende de forma personalizada.
Cabe recordar que la OAVD fue fundada en 1989 por el Govern, por lo que Baleares se convertía en la tercera Comunidad Autónoma en ofrecer un servicio de esas características. Y, a principios del año siguiente, abrió las primeras dependencias de la misma en los Juzgados de Palma, desde donde se ofreció una atención adecuada a los ciudadanos.
