El Parlament ha rendido homenaje este viernes las víctimas del Holocausto
PALMA DE MALLORCA, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Parlament, Baltasar Picornell, ha pedido a los representantes políticos y a toda la sociedad "que no permitan nunca la entrada de la xenofobia y del racismo en nuestras instituciones, en nuestras televisiones e incluso en nuestras conversaciones".
Picornell se ha expresado así este viernes durante su discurso con motivo del homenaje a las víctimas del Holocausto que ha tenido lugar en la Cámara autonómica. El acto ha contado con la presencia de representantes de la comunidad judía y otros colectivos víctimas de la barbarie nazi, junto con diputados y diputadas de los diferentes grupos parlamentarios autonómicos.
Desde la Cámara autonómica, han recordado que esta conmemoración se realiza anualmente y hace referencia a la fecha --27 de enero de 1945-- en que el ejército soviético liberó el campo de exterminio de Auschwitz, en Polonia. En 2005 la Asamblea General de las Naciones Unidas estableció esta fecha para la conmemoración anual de las víctimas del Holocausto, que el Parlamento balear organiza durante los últimos quince años.
En su discurso, Picornell ha recordado "a todos los millones de víctimas de la barbarie nazi, la mayoría judíos, pero también de otros colectivos, como los romaníes, sintis, homosexuales, comunistas, enfermos mentales o republicanos españoles", entre otros.
"Hoy en día, todavía somos testigos de cómo los discursos que poco a poco encendieron la chispa de la xenofobia y el estigma persisten, y como se incrementan antiguas y nuevas formas de prejuicio", ha dicho.
Por esto, ha remarcado que tienen que "hacer frente común contra la normalización del odio" y, como representantes públicos ha dicho que tienen "la responsabilidad de no entrar en el juego electoralista con según qué cuestiones y evitar que estos discursos se conviertan centro de un debate político frívolo y desinformado".
Por su parte, el presidente de la Comunidad Judía de Baleares, Arieh Girondo, ha defendido "la necesidad de no olvidar el Holocausto". Por esto, "cada año nos vemos en el Parlament con lágrimas en los ojos" y tenemos "la convicción de que, a pesar de todo, seguimos en las páginas vivas de la historia en este nuestro mundo, el mundo de todos los judíos y los gentiles, esta es la lección de Auschwitz".
A continuación se ha procedido al encendido de siete velas en recuerdo de las víctimas. El acto ha continuado con la interpretación del canto 'Male Rajamin' por parte de César Ribbs y de una oración para la misericordia, a cargo de Mani Hoffman. Después, se ha guardado un minuto de silencio en memoria de todas las víctimas del Holocausto.
