Los inspectores de Patrimonio del Consell han abierto un expediente informativo para determinar si es preciso imponer algún tipo de sanción
PALMA DE MALLORCA, 27 Feb. (EUROPA PRESS) - -
El PP reclamó hoy al Consell de Mallorca que proceda a la paralización inmediata de las obras del Monasterio de la Real hasta comprobar que los trabajos de rehabilitación que se están llevando a cabo en el claustro no han causado ningún daño en el edificio declarado Bien de Interés Cultural (BIC).
Así lo indicó el conseller 'popular', Fernando Rubio, tras la reunión de la Comisión de Urbanismo y Patrimonio celebrada esta mañana, en la que los partidos del equipo de gobierno de la Institución Insular votaron a favor de que continúen las obras, una decisión que la oposición consideró de "poco prudente".
Por su parte, la consellera insular de Patrimonio, Joana Lluïsa Mascaró, confirmó que no se contrató a ningún arqueólogo ni restaurador hasta que habían transcurrido diez días desde el comienzo de las obras, lo que achacó a un "error de transcripción" que se solventó en muy poco tiempo. Según explicó, las obras de reforma comenzaron el pasado día 30 de enero y no es hasta el día 10 de febrero cuando se les nombra.
Es por ello que los inspectores de Patrimonio han abierto un expediente informativo, para determinar si es preciso interponer alguna sanción. "Los informes internos del expediente recomendaban la contratación de un arqueólogo y un restaurador, pero por un error de transcripción no se nos comunicó este requisito hasta más tarde. Posteriormente se cumplió este paso, y se procedieron a las dos contrataciones", apuntó.
Pese a todo, en opinión de Rubio las obras deben suspenderse "hasta que se determinen si se han ocasionado daños" al monasterio protegido. Asimismo, reclamaron que se abra un expediente sancionador contra el promotor de las obras y la empresa concesionaria y que se depuren las responsabilidades oportunas, por haber comenzado las obras sin la supervisión de un arqueólogo, incumplimiento lo establecido en la Ley de Patrimonio.
Esta situación ha provocado, según apuntó Rubio, la "renuncia" del restaurador y del arquitecto contratados por la concesionaria, que se niegan a firmar el proyecto porque no se ha cumplido los requisitos de contratación previstos en la normativa.
Con todo, el PP reclamó una copia del expediente de contratación del proyecto y solicitó a los responsables del Consell insular información sobre la financiación de esta obra, a fin de conocer si cuenta con la aportación de capital privado.
Por su parte, Mascaró criticó al PP por utilizar esta "enmienda de error" para comparar la situación del Monasterio de La Real con lo ocurrido en el hospital de Son Espases, donde cabe recordar que se impuso una sanción de 60.000 euros al Ib-Salud y otra igual a la empresa concesionaria por haber comenzado la ejecución del proyecto sin haber nombrado previamente a un arqueólogo.
